FÚTBOL Mexicano Aquino tiene hambre de Mundial
EI oriundo de Oaxaca está en un buen momento en España con el Villarreal
BARCELONA, España — Javier Aquino apenas duda cuando se le inquiere sobre el significado de la fecha del viernes 13 de junio.
“El día del partido de México contra Camerún”, responde casi al vuelo el futbolista de 23 años, actualmente jugador del Villarreal en la liga española.
Oriundo de San Francisco Ixhuatán, pequeña localidad de Oaxaca cercana a la costa del Pacífico en el sur de México, Aquino disfruta al máximo su condición de protagonista en uno de los equipos de moda de la liga española.
Junto al Villarreal, el joven mediocampista mexicano está concentrado en la consecución de una codiciada plaza para jugar la próxima edición de la Liga de Campeones del fútbol europeo, pero al mismo tiempo también está bien atento a cuanto acontece en su país natal.
En particular le interesa lo que ocurre con la selección tricolor mexicana que selló el año pasado, con algunas dificultades luego de quedar cuarta entre seis equipos por los tres boletos de la CONCACAF, la clasificación para jugar el Mundial de Brasil desde junio.
“Fue un año complicado en el hexagonal (de la CONCACAF), pero ya quedó atrás”, opina el oaxaqueño. “Hay que aprender de los errores, pero ahora toca centrarse en lo que viene. Creo que podemos dar la sorpresa”.
Aquino no jugó en la serie de repechaje contra Nueva Zelanda, solventada favorablemente por un combinado exento de emigrados al fútbol europeo, y se enteró del pase a Brasil a la mañana siguiente en España, al repasar los artículos publicados por la prensa en Internet.
“Se tomó la mejor decisión en ese momento y la respetamos. Somos profesionales y la crítica forma parte de la vida del jugador”, considera sobre el clima crispado que generó la agónica clasificación mexicana. “Intentamos hacerlo lo mejor posible pero nos podemos equivocar y la gente también tiene derecho a opinar”.
Esa supersticiosa fecha del viernes 13 la tiene Aquino marcada en rojo en el calendario, pues sueña con disputar el certamen mundialista y ampliar así su notable palmarés internacional, que ya cuenta con la medalla de oro olímpica conseguida en los Juegos de Londres 2012 y otro triunfo en los Juegos Panamericanos de 2011 en Guadalajara, Jalisco. La visita del ‘Piojo’
A esos efectos recibió la semana pasada la visita de Miguel Piojo Herrera, el director técnico de la selección mexicana, quien se reunió en Villarreal con el volante oriundo de Oaxaca y con su compatriota y compañero de habitación en las concentraciones del equipo español, Giovani Dos Santos, de cara a intercambiar impresiones de cara a la gran cita de mediados de año en Brasil.
“Platicamos del tipo de jugador que (Herrera) busca para la selección, pero no nos aseguró nada. Estamos a su disposición y vamos a trabajar para ganarnos un sitio”, se limitó a comentar Aquino, quien se mostró receloso también de opinar en torno a la renuncia a la selección mexicana del destacado goleador de la Real Sociedad, Carlos Vela, quien también se reunión en España con el director técnico del Tri.
La fecha del debut mundialista no es la única que el oaxaqueño tiene grabada a fuego en la cabeza. Un rincón especial en su memoria ocupa también el día en que, con apenas 15 años, visitó por primera vez el estadio Santiago Bernabéu del Real Madrid.
“Pasamos por Madrid con el equipo inferior de Cruz Azul después de jugar un torneo en Albacete, se nos retrasó el vuelo de regreso y aprovechamos para visitar el estadio. Pudimos sentarnos en el banquillo y me fotografié con la última copa de Liga de Campeones que ganaron. Aunque entonces nunca pensé que acabaría jugando en esa cancha”, rememora el mexicano, que el fin de semana pasado volvió a visitar el feudo del equipo merengue en la derrota 2-4 que sufrió el Villarreal frente al ahora colíder de la liga.
En el quinto lugar de la clasificación, con 40 puntos en 23 partidos, los amarillos están a sólo cuatro del Athletic de Bilbao en la lucha por el cuarto y último boleto directo para ir a la anhelada Champions League, conscientes de que Barcelona, Real Madrid y Atlético de Madrid coparán las tres primeras plazas.
Aquino, quien ha disputado todos los partidos esta temporada, tanto en liga como en Copa del Rey, ya sea de titular o suplente, no sabe de límites en su incipiente pero exitosa carrera deportiva, y espera mejorar en la recta final del campeonato para ayudar a su equipo.
Pese a la abultada derrota en esta gran ocasión, el internacional tricolor ya piensa en la recuperación en el partido de la próxima jornada frente al Celta de Vigo. Sin freno de mano
Y es que el mexicano quema tantas etapas en Villarreal, donde hilvana fichaje, ascenso a primera división y competencia por la Champions League, como juega sobre la cancha: a toda velocidad, tanto en defensa como en ataque, sin aparente freno de mano ni tiempo para recrearse.
“No tengo supersticiones ni celebro los goles de forma especial, apenas un gesto a mi familia”, expone, consciente de que tampoco goza de demasiadas ocasiones para el festejo individual (tiene sólo una diana en liga). “Es verdad que marco pocos goles, por mi posición debería anotar más. El entrenador (Marcelino García Toral) me dice que tengo que ser más paciente para mejorar en la definición, me ha dado minutos y le estoy muy agradecido por su confianza. Aprendo mucho con él, creo en mí mismo y aún tengo margen de mejora”, subraya quien a su vez apostó fuerte por el Submarino Amarillo, fichando con el club cuando todavía estaba en la segunda división de España.
Al fin y al cabo, su ídolo reconocido, el ex internacional argentino César Chelito Delgado, a menudo alcanzó los dobles dígitos como goleador jugando para el Cruz Azul, y Aquino no tiene reparos en reconocer que intentó moldear su juego en base al del carismático delantero sudamericano.
“Miraba los partidos con mis padres y mis hermanos por televisión. Soy un poco más del Barsa que del Madrid por los mexicanos que allí jugaron, pero a quien admiraba era al Chelito, y buscaba imitar sus movimientos”, explica el hoy internacional tricolor, a quien el profesor Jesús Del Muro descubrió en una visoria.
Al no coincidir con Delgado en el equipo cementero, Aquino debió contentarse con intercambiar camisetas rivales tras enfrentar a los Rayados de Monterrey, actual equipo del veterano atacante rosarino en México.
Humilde en el trato pero constante en el esfuerzo, el veloz Aquino se revela como un futbolista de pico y pala, sin miedo a encarar cuanto rival o reto se le presente en el camino, dispuesto a superar etapas, coleccionar camisetas y acumular triunfos.
El junio será la gran cita del fútbol, donde México arrancará su sueño mundialista frente a Camerún el 13 de junio en Natal para luego medirse con el anfitrión Brasil el 17 en Fortaleza y con Croacia el 23 en Recife. Aquino no se la quiere perder.