BRAVO, EL HÉROE DE ‘LA ROJA’
El arquero, capitán y una de las figuras de la selección chilena de fútbol, se transformó en el líder indiscutido de una generación de jugadores que ha llevado a lo más alto el fútbol de su país con la conquista de otro título en la Copa América.
Arturo Vidal marró un penal. Alexis Sánchez ya había sido reemplazado tras un desgaste enorme. Cuando las papas quemaban, ahí estaba Claudio Bravo. De nuevo.
Un año después de atajar un penal en una definición desde los 12 pasos para darle a Chile su primera Copa América, Bravo se erigió otra vez en el salvador. Una nueva definición por penales tras un empate 0-0 la decidió el portero al contener el tiro de Lucas Biglia el domingo en la final de la Copa América Centenario ante Argentina.
Irónicamente, Bravo, arquero del Barcelona, había sido muy criticado por su desempeño en los dos primeros partidos de la Copa. Pero recuperó su nivel y fue determinante en la victoria 2-0 sobre Colombia en las semifinales, en la que tuvo tres intervenciones de alto vuelo.
En la misma final preservó el empate desviando con la punta de los dedos un cabezazo de Sergio Agüero en la prórroga que se metía justo por debajo del travesaño. Anteriormente había apurado a Gonzalo Higuaín en un mano a mano y forzó el remate desviado del atacante argentino.
“Bravo es el referente del grupo y los técnicos necesitamos jugadores que lideren a los grupos que dirigimos”, declaró el director técnico argentino de la selección chilena, Juan Antonio Pizzi. “Facilita mucho nuestra interacción entre el grupo de jugadores y el cuerpo técnico, y no es casualidad que sea arquero del Barcelona, no es casualidad que lleve ciento y pico de partidos con la selección. No es casualidad que sea campeón de América”.
En un equipo de jugadores temperamentales como Vidal y Gary Medel, Bravo aporta una impor- tante cuota de serenidad y evita que el equipo pierda el control, como sucedía en el pasado.
El respeto que inspira en sus compañeros se hizo visible en la forma en que lo felicitaron después de la victoria contra Colombia y nuevamente tras ser decisivo en la final.
“Nadie creía en nosotros, ésta una lección para todo el mundo, para que crea. Hoy lo demostramos ante un gran equipo, con grandes jugadores, ante un marco de público increíble”, declaró Bravo. “Lo primordial es que nunca bajamos los brazos, siempre creímos en nosotros”.
En el camino a la final, el equipo dirigido por Pizzi y encabezado en la cancha por Bravo. Medel, Vidal y Sánchez, este último elegido como ganador del Balón de Oro al mejor jugador del torneo, consiguió una goleada histórica de 7-0 sobre México en los cuartos de final y luego logró un cómodo triunfo 2-0 sobre Colombia en las semifinales. Ademas, el delantero Eduardo Vargas terminó como el máximo artillero del certamen con seis goles.
“Por suerte pudimos llegar a un grupo de jugadores que es para destacarlo, que es para admirarlo, y que ojalá nos permitan seguir evolucionando y seguir creciendo con esta selección”, apuntó Pizzi, quien ganó su primer título como entrenador luego de dirigir al Valencia de España, al León de México y a San Lorenzo de Argentina, entre otros equipos. “A media que van pasando partidos, pasando tiempo, este grupo va superando sus límites y esperemos que vayamos ayudándonos para poder seguir consiguiendo cosas”. Replanteo argentino
Del otro lado, el técnico argentino Gerardo Martino, que tambien estuvo a cargo del plantel que perdió la final del año pasado en Santiago, queda con un rompecabezas desarmado y probablemente sin su pieza más importante tras el anuncio de Lionel Messi de retirarse de la selección de su país.
“En realidad no es fácil de explicar (la derrota), porque hay situaciones que se pueden explicar desde lo futbolístico, y otras situaciones que se pueden explicar, si se quiere, desde la fortuna”, señaló, antes de conocer la decisión de Messi. “Respecto al partido, creo que Argentina debió haberlo ganado. Debió haberlo ganado en los 90 minutos, debió haberlo ganado en el alargue, y no lo pudimos ganar”.
El anuncio del mejor futbolista del mundo generó estupor en Argentina, donde es idolatrado pero donde también ha cosechado cuestionamientos por no haber conseguido ni una Copa del Mundo ni una Copa América. Sin embargo, deportistas, dirigentes y aficionados arroparon a Messi en su país y le rogaron que reconsidere su decisión de renunciar. Las redes sociales se saturaron de mensajes en los cuales le han pedido al máximo goleador de la selección argentina no arrojar la camiseta.