Houston Chronicle Sunday

Adiós ‘Manu’, gracias por todo

- g f.moores@chron.com GERMÁN FERNÁNDEZ-MOORES

RETIRO: a los 41 años y luego de 16 temporadas con los Spurs, Ginóbili dejó el básquetbol.

La noticia que los ‘fans’ de los Spurs temían escuchar desde la eliminació­n en los playoffs de la temporada pasada ante Golden State Warriors finalmente se hizo realidad: Emanuel ‘Manu’ Ginóbili ya es un ex jugador de básquetbol.

El argentino hizo el anuncio el lunes después de meditar sobre su futuro durante las vacaciones de verano y luego de esperar el regreso de Gregg Popovich a San Antonio desde Europa para comunicarl­e su decisión.

De poco sirvió el deseo de ‘Pop’, su mentor desde que llegó a la NBA hace 16 años, de que siguiera por al menos otra temporada. Tampoco alcanzó el consejo que le dio Steve Kerr, actual coach de los Warriors y ex compañero suyo en San Antonio, que luego de eliminar a los Spurs le susurró a Manu al oído que aún no se retirara.

Pero con 41 años de edad, como admitió en una de sus columnas para la prensa de su país, los golpes de la alta competenci­a de la NBA le duelen cada vez más. Y no le ha sido fácil recuperars­e.

Se va con cuatro anillos de campeón tras integrar un trío fantástico junto a Tim Duncan y Tony Parker, bajo la tutela de Popovich, a quien en principio le costó controlar la ‘rebeldía’ táctica de ese atrevido escolta que venía de brillar en Europa y al que luego le dio le terminó soltando las riendas para que expresara toda la versatilid­ad de su talento.

Protagonis­ta y ganador, Popovich lo definió como el ‘máximo competidor’ que ha dirigido.

Por encima de todo fue un jugador de equipo. Si una noche no estaba derecho para el aro, colaboraba con asistencia­s, con rebotes o simplement­e con una jugada mágica que definía un partido en el momento más caliente, cuando muchos se esconden y evitan tomar la pelota.

Como aquella noche en Atenas, donde tuve el honor de presenciar aquella ‘palomita’ desesperad­a que hizo para tirar y marcar en la última jugada del partido que Argentina ganó angustiosa­mente frente a Serbia para encaminars­e hacia la gloria: la medalla de oro olímpica.

En el camino, Argentina derrotó en las semis a las estrellas de Estados Unidos, a las que ya había superado dos años antes en el Mundial de Indianápol­is para convertirs­e en el primer ‘verdugo’ de la historia del ‘Dream Team’. Todo de la mano de Manu, quien abrió las puertas de la NBA para sus compatriot­as.

¡Salúd, campeón!

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Edward A. Ornelas / San Antonio Express-News
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