APRENDIZAJE CONSTANTE
Los Rockets se adaptan a jugar sin Harden
Los dos primeros partidos de los Rockets sin James Harden esta temporada mostraron el claro contraste de las dos caras que puede tener el equipo sin los servicios de su estrella.
En el primero, arrollaron al Magic en Orlando, donde Houston hizo gala de una enorme riqueza de recursos y llegó a sacar una ventaja de 28 puntos al promediar el tercer cuarto, pero en el segundo encuentro, cuando los Warriors subieron la vara en el Toyota Center, cedieron frente a la presión en el último cuarto y terminaron perdiendo sin atenuantes pese a jugar un partido muy parejo en los tres períodos previos.
Uno de los puntos positivos para rescatar ha sido el gran nivel que mostró Gerald Green, quien aportó 27 puntos en el cómodo triunfo de 11698 el miércoles en Florida y luego sumó 29 en la derrota de 124-114 el jueves frente a Golden State tras salir desde el banquillo como suplente.
La clave en el juego de Green fue su puntería para acertar desde larga distancia: embocó en sus primeros cinco intentos de tiros de tres puntos y cerró el partido con una estadística de siete de diez triples en Orlando.
En ese encuentro, en el que los Rockets siempre estuvieron al frente del marcador, también cumplió un rol destacado Clint Capela, quien sumó 21 unidades y además colaboró con ocho rebotes.
Otro punto alto fue el nivel del reemplazante de Harden en la alineación titular, Eric Gordon, quien anotó 17 puntos y acumuló seis asistencias en el triunfo sobre el Magic y luego marcó 30 en la derrota ante Golden State, que sacó a relucir la casta de campeón con una respuesta contundente en el último cuarto.
El choque del Toyota Center bien podría ser un aperitivo de lo que pueden llegar a encontrar ambos equipos en los playoffs ya que los Warriors lideran la Conferencia del Oeste con foja de 31-8 (al cierre de esta edición) y los Rockets son sus principales escoltas con 27-10 y dos juegos de ventaja sobre el tercero, San Antonio Spurs (26-13).
Si bien es cierto que a Houston le faltaba Harden, quien se recupera de la lesión que sufrió en su pierna izquierda (por la que originalmente fue dado de baja por dos semanas), los Warriors no pudieron contar con Kevin Durant, lesionado en su pantorrilla derecha.
La diferencia esta vez quizás no estuvo tanto en el juego en sí, sino en el liderazgo en el momento de la definición.
En ese sentido la conducción de Stephen Curry fue superior a lo que pudo hacer Chris Paul, quien si bien no jugó mal y terminó con 28 puntos y nueve asistencias se mostró algo errático cuando había que asegurar la victoria después de un trámite muy parejo.
Curry terminó mostrando toda su categoría con 29 puntos, pero no estuvo solo ya que Klay Thompson creció ante la ausencia de Durant y secundó al armador con 28 unidades.
Otro que fue decisivo en el triunfo de la visita fue Draymond Green, quien pasó al frente de la lista de triples dobles en la historia de la franquicia (con 21 superó a Tom Gola) luego de una soberbia actuación que incluyó 17 puntos, 14 rebotes y diez asistencias.
El equipo que conduce Steve Kerr está muy bien encaminado en la defensa del título y ha demostrado que su aceitado juego no se altera en condición de visitante ya que con la victoria en Houston estiró a nueve su racha de triunfos consecutivos fuera de casa. Además, el conjunto californiano es el mejor de toda la liga esta temporada jugando como visitante, con un total de 16 triunfos.
Esa característica, que cobra mayor importancia en los playoffs, y la variedad de recursos hacen de Golden State un equipo aún más completo en comparación al arsenal con que ya contaba Kerr.
Por el lado de los Rockets, que volvían a presentarse el sábado en Detroit ante los Pistons, tendrán que mejorar su defensa si no quieren seguir sufriendo durante la ausencia de Harden.