Houston Chronicle

Para abajo

El nivel de juego en la Copa de Oro ha empeorado y se ha nivelado para abajo

- GERMÁN F. MOORES g f.moores@chron.com

Al final se dio la lógica: México y Estados Unidos, los dos selecciona­dos más fuertes y con más recursos de la Concacaf, llegaron a la definición de la Copa de Oro en Chicago.

Pero más allá del partido decisivo (que se jugaba el domingo, al cierre de esta edición) al analizar el nivel de juego en general en esta edición del torneo regional quedó en evidencia que ha sido muy bajo.

Tanto a los mexicanos como a los estadounid­enses les costó muchísimo llegar a la final, y pasaron varios sustos contra rivales que en los papeles son notablemen­te inferiores tanto en el nivel de sus jugadores como de sus técnicos, selecciona­dos, ligas locales y recursos en general.

Al ver la paridad que han arrojado algunos resultados, hay quien podrá decir que el nivel de los selecciona­dos de las islas del Caribe, por ejemplo, ha subido notablemen­te. Quizás esa sea la forma de ver la mitad del vaso medio llena, pero la otra mitad también puede reflejar que el nivel de las supuestas potencias de la región también ha dejado mucho que desear para dos equipos como México y Estados Unidos que están ambos en una nueva etapa de renovación bajo la batuta de nuevos directores técnicos de cara al proceso mundialist­a que lleva a Qatar 2022.

Para Estados Unidos ha sido prácticame­nte borrón y cuenta nueva después de haber sufrido la humillació­n de no haber clasificad­o al Mundial de Rusia 2018 al perder en su última presentaci­ón del hexagonal final de la Concacaf en su visita a Trinidad y Tobago.

En este torneo, el equipo que ahora conduce desde el banquillo el DT Gregg Berhalter y que lidera en el campo de juego el joven mediocampi­sta ofensivo Christian Pulisic se tomó revancha de aquella dura derrota al golear a los trinitario­s por 6-0.

También golearon, por 4-0 al ignoto selecciona­do de Guyana (el único de Sudamérica que juega en la Concacaf ), pero después pasaron varios apuros. En la definición de su grupo avanzaron primeros con un ajustado triunfo de 1-0 sobre Panamá, y luego apenas ganaron también por 1-0 frente a modestísim­o equipo de Curacao en los cuartos de final.

El marcador de la victoria de semifinale­s frente a Jamaica fue un poco más amplio, pero ese 3-1 no reflejó lo parejo que fue el encuentro, cuyo último gol recién llegó sobre el final, cuando los jamaiquino­s buscaban desesperad­amente un empate.

Por el lado de México fue bastante parecido: una cómoda goleada de 7-0 a Cuba para arrancar y un más trabajado triunfo de 3-1 sobre Canadá gracias a la categoría del veterano Andrés Guardado lo posicionar­on para ir en busca del primer lugar de su grupo, pero una decepciona­nte actuación contra el modesto equipo de Martinica dejó muchísimas dudas pese a una victoria de 3-2.

Depués vinieron las manos salvadoras de Guillermo ‘Memo’ Ochoa para dar el pase en Houston a las semifinale­s en una angustiosa definición con tiros penales tras igualar sin goles con Costa Rica en 120 minutos de juego.

Pese a la prolongaci­ón del invicto bajo el mando del técnico argentino Gerardo Martino, la luna de miel de los medios mexicanos con el ‘Tata’ parece haber llegado a su fin entre las primeras críticas por el flojo nivel de su equipo, algo que quedó más expuesto aún en el increíble triunfo de 1-0 en las semifinale­s sobre Haití en tiempo extra después de que el ‘Tri’ fue beneficiad­o por un dudoso tiro penal cuando Raúl Jiménez se dejó caer al borde del área, engañó el árbitro qatarí Abdulrahma­n Al Jassim y luego convirtió el gol del triunfo.

 ??  ??

Newspapers in English

Newspapers from United States