El retiro de un gran goleador
Sin ser el más corpulento, el más fuerte o el más veloz, Sergio Agüero aprovechó al máximo su gran virtud para convertirse en uno de los máximos y mejores goleadores del fútbol mundial.
El argentino, habilidoso, ha sido uno de los delanteros más inteligentes para moverse en el área rival. Siempre parecía estar un segundo antes que sus marcadores y con su lectura del juego anticipaba muy bien las jugadas de ataque, tanto para ir a buscar un balón a los espacios libres como para definir con un marcador encima o para aprovechar un mal despeje o un pase equivocado de sus rivales.
Como un buen cazador, siempre estaba atento para ir en busca de su presa en el momento correcto. Fue quizás la versión moderna de otros dos grandes artilleros de características similares como mexicano Hugo Sánchez y el brasileño Romario, que también brillaron en el fútbol europeo. Del primero me hizo recordar su gran capacidad para anotar de cabeza pese a su baja estatura, y del segundo su virtud de hacer simple una jugada que en principio parece difícil. Eso sí, los tres anotaron verdaderos golazos.
Con mucha tristeza, el “Kun” anunció la semana pasada en España su retiro del fútbol a los 33 años de edad por una arritmia cardíaca que le fue detectada cuando tuvo que salir del campo de juego en un partido que disputaba con su nuevo equipo, el Barcelona, frente al Alavés el 30 de octubre.
Agüero apenas jugó cinco partidos con el equipo catalán luego de haber pasado los últimos diez años en el Manchester City, donde se convirtió en el máximo artillero del club con 260 goles y brilló como una de las máximas estrellas del fútbol inglés, después de haberse destacado antes en España con el Atlético de Madrid y en Argentina con Independiente de Avellaneda, donde debutó con apenas 15 años.
Con Argentina fue bicampeón mundial juvenil sub20, campeón olímpico en los Juegos de Bejing en 2008 y de la Copa América este año en Brasil, además de subcampeón del mundo en la final que la albiceleste perdió ajustadamente con Alemania en Brasil 2014.
En total anotó 42 goles en 97 partidos internacionales, marca que lo deja en el historial como el tercer máximo artillero de su país, sólo por detrás de su compañero y amigo Lionel Messi (primero con 80) y de Gabriel Batistuta (segundo con 56).