BAJO LA LUPA
También es algo que les pemitirá a sus federaciones miembro ir adaptándose a las condiciones que encontrarán para la Copa del Mundo de 2026, que será la primera de la historia con la participación récord de 48 equipos.
Mientras ya empezó a rodar el balón con los dos amistosos que disputó recientemente de cara a esa cita, la federación estadounidense al parecer no decidirá a su próximo director técnico hasta quizás el próximo verano boreal ya que luego de los problemas que sufrió en la cúpula directiva de la selección masculina ha contratado una compañía
consultora externa con ese objetivo, entre otros.
El último golpe ha sido la renuncia del exdelantero Earnie Stewart, quien había asumido como director deportivo de la selección en 2018 después que Estados Unidos se quedó sorpresivamente afuera del Mundial de
Rusia tras fracasar en la eliminatoria de la CONCACAF. Esa fue su primera ausencia mundialista desde Italia 1990.
Stewart, junto el también exdelantero Brian McBride como gerente general y al entrenador Gregg Berhalter, otro ex integrante de la selección, encabezó la renovación del equipo con una camada de jugadores talentosos que brillaron en los últimos mundiales juveniles de la FIFA. La renovación fue exitosa, Estados Unidos clasificó para jugar en Qatar y fue el único de la CONCACAF en avanzar a los octavos de final, donde fue eliminado por Holanda.
Si bien dejó una grata imagen, incluso empatando un partido sumamente parejo con Inglaterra, la favorita de su grupo, fue también evidente que ese joven plantel estaba muy verde aún para ir por un premio mayor en Qatar.
Pero ahora, cuando Estados Unidos por fin podría prepararse para dar el gran salto en 2026, Stewart se convirtió en la víctima más reciente de un escándalo que sacudió a la cúpula de la selección, y que se suma a las salidas previas de McBride y Berhalter, con el futuro del equipo ahora en un limbo.
Los tres han sido ‘víctimas colaterales’ del caso que involucró al joven delantero Giovanni Reyna en el seno del equipo en la concentración de
Qatar. Jugó menos de lo que pensaba iba a jugar, el DT lo criticó por supuestamente no haber hecho su mayor esfuerzo en los entrenamientos y los padres exfutbolistas del joven jugador, Claudio Reyna y Danielle Egan, arremetieron contra la dirección.
Así y todo, entre tantas malas noticias hubo una que debería alegrar al DT interino, Anthony Hudson, quien fue asistente de Berhalter en el proceso previo. El talentoso mediocampista Weston McKennie dejó a la Juventus de Italia, club que cayó en desgracia por corrupción en el ‘calcio’, para firmar con el Leeds United de Inglaterra, donde se reencontrará con sus compatriotas Tyler Adams y Brenden Aaronson bajo la batuta del DT Jesse Marsch y su nuevo asistente Chris Armas, ambos también exinternacionales estadounidenses.
La conexión de la selección con el Leeds, cuyo dueño minoritario es el mismo grupo propietario de los 49ers de San Francisco en la NFL, podría llegar a incluir un eslabón más interesante aún si se confirman los rumores de un supuesto interés de la federación por contar con Marcelo Bielsa, el experimentado DT argentino que guió al club inglés en su regreso a la Liga Premier.