La edad no es un obstáculo para alcanzar los sueños
Un grupo de 30 personas recibe diploma de secundaria tras atender curso que ofrece la biblioteca pública de L.A.
En una graduación poco convencional pero muy emotiva, Octavia Sotelo junto a 29 estudiantes, principalmente latinos, caminaron ayer orgullosos por el escenario del auditorio Taper, en el centro de Los Ángeles, para recibir su diploma de secundaria.
Sotelo, de 49 años, dijo sentirse emocionada ya que después de dos años de arduo trabajo pudo ver el resultado en sus manos.
“Es grandioso porque es como un pedacito que me hacia falta. Es algo que siempre quise hacer aquí [en EEUU] y por falta del tiempo y el trabajo no me había dado la oportunidad”, explicó Sotelo con su diploma en la mano.
´6DFULÀFDQGR XQ SRTXLWR OD familia y los amigos fue muy emotivo terminarlo”.
De igual manera, Alejandro Ruiz, de 57 años y quien vestía su toga y birrete, recibió orgulloso su diploma.
El hombre, de origen mexicano, dijo que parte de su motivación fueron sus seis nietos.
“Yo siempre quise conseguir mi diploma y ahora que lo hice esto no va a ser excusa para que ellos no quieran acabar [la secundaria]”, aseveró el recién graduado.
Sotelo y Ruiz formaron parte del segundo grupo de graduados del programa Career Online High School (COHS) de la biblioteca publica de Los Ángeles, que comenzó en 2014.
Bajo este programa los estudiantes pueden obtener todas sus clases por Internet sin necesidad de ir a una escuela y en su propio tiempo libre.
“Es un programa muy exitoso ofrecido por primera vez por una biblioteca pública de la nación y es una buena forma de demostrar las buenas contribuciones que la biblioteca hace para la ciudad”, aseveró John F. Szabo, bibliotecario de la ciudad.
“Actualmente tenemos 147 estudiantes inscritos en el programa y esperemos que pronto todos se gradúen”, añadió.
El curso, que usualmente dura 18 meses, es una alternativa para los adultos mayores de 19 años que no obtuvieron su diploma de secundaria de la forma tradicional.
Familiares orgullosos
Junto a Sotelo y a Ruiz caminaban sus familiares contentos de ver que la edad no fue un obstáculo para los orgullosos graduados.
Vanessa Ruiz, de 30 años, e hija de Ruiz, dijo que desconocía que su padre estaba estudiando y en la familia todos se sorprendieron.
“No nos dijo hasta que ya iba a ser la graduación pero yo sabía que esto era algo que él quería porque siempre hablaba del tema”, aseveró.
“Él siempre nos ha enseñado que nunca es tarde para hacer lo que uno quiere”, recalcó.
“Me siento muy orgullosa que se tomó el tiempo para hacerlo y lo hizo muy bien”, agregó Silvia Ruiz, esposa del orgullo graduado.
Por su parte, Jorge Rivero Narváez dijo sentir gran admiración y amor por su esposa, Octavia Sotelo.
“Yo quisiera que hubiera mucha gente como ella… Ella me inspira mucho con cada cosa que hace”, aseveró Narváez quien espera ser el próximo en obtener su diploma.
“Es trabajoso, yo la veía a ella cuando se levantaba a las cinco de la mañana y se ponía a estudiar antes de irse a trabajar y regresaba del trabajo y a seguir estudiando”, recordó.
Sotelo piensa que gracias al diploma que obtuvo y clases TXH WRPy OH EHQHÀFLy SDUD TXH el restaurante donde trabaja como mesera la ascendiera a un puesto de administración.