Alejandro Solalinde ‘Luchar contra el genocidio de migrantes es mi contribución’
El sacerdote mexicano lucha sin descanso por los derechos de los migrantes
Entre todos los golpes que el sacerdote Alejandro Solalinde ha recibido en sus más de 10 años al frente de la defensa de inmigrantes indocumentados —principalmente centroamericanos— ninguno había sido tan fuerte como la muerte en un accidente automovilístico de su brazo derecho y amigo: el guatemalteco Alberto Donis.
“Lo mataron”, afirma en cuanto se le pregunta sobre los hechos ocurridos el pasado mes de julio y poco después de un homenaje póstumo que organizó la Comisión Nacional de Derechos Humanos en honor del joven, quien murió a los 32 años de edad .
Por alrededor de un lustro, Donis fue el dirigente de facto (coordinador) del albergue Nuestros Hermanos en el Camino, en Ixtepec, Oaxaca.
Solalinde, de 72 años de edad, toma el retrato de Donis y camina lentamente por el salón del evento en la capital mexicana después de dar un largo discurso sobre la contribución del joven —que llegó al albergue después de ser víctima de un asalto.
Luego de ello, se volvió un activista en los peores años para la migración indocumentada hasta que se le atravesó una máquina en la carretera y se impactó contra ella.
“Sin él”, acota el sacerdote —poco después de entregar la foto a la familia de Donis— “miles de migrantes no hubieran llegado a su destino, a Estados Unidos: la migración perdió a un aliado”.
Solalinde arribó a Ixtepec, Oaxaca, como misionero a finales de la década pasada durante una época clave del éxodo masivo de centroamericanos que huía de extorsiones, reclutamientos y asesinatos de pandillas, quienes tomaron el control de sus lugares de origen para encontrarse en México.
Sin embargo, en este último lugar se enfrentaron con ataques similares ya de bandas de ladronzuelos locales, ya de los Zetas —una organización FULPLQDO \ GHO QDUFRWUiÀFR³ o ya de funcionarios públicos cómplices.
Desde entonces, Solalinde enfrenta a los delincuentes con diversos métodos: desde la estrategia mediática a la denuncia judicial pasando por encarar al tú por tú a policías, sicarios y mandamases regionales.
“Aprendí a defender a los migrantes para que siguieran su camino y esa ha sido y es mi contribución al mundo hispano de Estados Unidos”, UHÁH[LRQD
“A la migración nada la va a parar. ¡Cuántas veces Beto [Alberto Donis] y yo les informamos a los migrantes de los peligros y de todos modos siguieron