Abuelita mexicana demanda a DHS por demora en Visa U
Teme que su militancia en grupos proinmigrantes la hayan convertido en un blanco del gobierno
Cuando no está trabajando de noche o cuidando a sus nietos de día, Genoveva Ramírez se dedica al activismo comunitario en Chicago (Illinois) y ayer, ante su inminente deportación, demandó al Departamento de Seguridad Nacional (DHS) por demorar su solicitud para una visa “U”.
“Quieren que me autodeporte… una deportación sería un dolor muy grande, porque mis hijos han hecho su vida acá, tengo a mis nietos acá, entonces sería una cosa tremenda separarme de mis nietecitos y de mis hijos”, explicó Ramírez, quien vive con su familia en la localidad de Berwyn.
Es miembro del Sindicato Internacional de Trabajadores de Servicios (SEIU), de la organización “PASO”, y de “Comunidades Organizadas contra las Deportaciones” (OCAD), un grupo de inmigrantes indocumentados que aboga contra las deportaciones y la “criminalización” de las minorías en Chicago.
Ramírez teme que su militancia y visibilidad en esos grupos la hayan convertido en blanco del gobierno, pero “lo único que hacemos es defender a nuestras familias, nuestra comunidad”, argumentó.
Desde que emigró en 2001, Ramírez trabaja limpiando RÀFLQDV GH QRFKH \ GXUDQ- te el día cuida a sus nietos mientras sus cuatro hijos se van a trabajar.
Al salir de trabajar una madrugada fue detenida por una LQIUDFFLyQ GH WUiÀFR \ DXQTXH nunca fue prioridad para la deportación bajo la Administración Obama, mantuvo VXV FLWDV FRQ OD 2ÀFLQD GH ,Qmigración y Aduanas (ICE).
Sin embargo, en agosto pasado, en su último “chequeo” con ICE, le dijeron que preparara su boleto de regreso a México para el próximo 31 de octubre.
Pero en septiembre de 2016, Ramírez solicitó una visa “U”, que EEUU concede a víctimas y testigos de ciertos crímenes si colaboran en las investigaciones y procesamiento judicial del caso.
Ramírez dijo que fue víctima de “una agresión tremenda” en su casa y aún recuerda cómo fue golpeada y cómo uno de los ladrones agarró a su nieto de cuatro años “y lo tiró por las escaleras”.
Ella considera que la demora en los trámites por parWH GH OD 2ÀFLQD GH 6HUYLFLRV de Inmigración y Ciudadanía (USCIS) –una demora que en algunos casos puede ser de hasta tres años- la está poniendo al borde de la deportación.O