‘No es mi presidente’ corean cientos de personas en L.A.
Varias ciudades a través de la nación manifestaron ayer su inconformidad con el presidente Trump
En una fecha histórica donde se honra el Día del Presidente, cientos de personas llenaron las escalinatas del Ayuntamiento de Los Ángeles el lunes por la mañana para revelarse en contra del actual mandatario, Donald J. Trump, y decirle que “no es mi presidente”.
Ni la lluvia que parecía llegar en cualquier momento detuvo al grupo de aproximadamente 500 personas de todas las edades a participar en su protesta de repudio en contra del republicano.
“Vengo en representación de mis padres que son indocumentados y tienen miedo a venir por temor a que se los lleven”, dijo Brian Rodríguez, de 17 años, quien ondeaba una bandera de México entre la multitud. “Esta bandera es en representación de todos los mexicanos que trabajan aquí”, explicó.
Rodríguez dijo que su molestia con Trump es porque él esta amenazando a jóvenes como él a perder a sus padres indocumentados.
“Yo [ahora] tuviera que estar preocupándome por la universidad y no por saber si mis padres van a estar cuando llegue a casa”, aseveró, explicando que salió de su casa a las 5:00 de la mañana para poder llegar con un grupo de compañeros desde Inglewood al centro de Los Ángeles en autobús.
“Le pedimos a Trump que tenga un corazón porque nosotros los mexicanos no somos como él nos quiere hacer ver. Los inmigrantes venimos a trabajar y los estudiantes como yo queremos hacer este país
dijo Rodríguez, quien es ciudadano estadounidense.
Su compañero, Jason Aldana, dijo que estaba participando en la protesta porque Trump no esta actuando correctamente y en honor a sus padres él quiso levantar su voz.
“Yo siento que es mi responsabilidad decirles a mis padres, quienes [son] inmigrantes, que aquí estoy”, expresó, añadiendo que sus padres huyeron de la guerra de El Salvador para obtener una vida mejor.
Como latino gay, Aldana dijo que para él también es importante representar a la comunidad LGBT sin ser criticado. “Hay el estereotipo que el hombre latino solo debe ser macho, pero yo soy un hombre luchando por una causa”, explicó.
mejor”,
Los protestantes cantaban “¡La gente unida, jamás será vencida!” con docenas de pancartas en manos que demostraban el disgusto con el mandatario. La famosa frase de “No es mi presidente, no es mi presidente” se escuchó una y otra vez.
Con su pancarta en mano Federico Rodríguez, de 16 años y estudiante en Inglewood, dijo que protestaba en nombre de sus padres indocumentados. “Tengo miedo de las redadas que dicen que están ocurriendo”, dijo el joven. “Me molesta que el presidente no quiere a las minorías”.
Toda la nación unida contra Trump
Alrededor de una veintena de ciudades a través de la nación, incluyendo Los Ángeles, Chicago y Nueva York, se manifestaron el mismo día para demostrar la inconformidad contra el presidente Trump, que llegó a la Casa Blanca el pasado 20 de enero
La manifestación de Nueva York fue convocada frente al hotel que lleva el nombre de Trump, en la plaza Columbus Circle, y se extendió por nueve cuadras a lo largo de Central Park.
Fue convocada por redes sociales bajo el lema “No es mi presidente”, coincidiendo con la celebración del festivo del Día del Presidente.
“Donald Trump es literalmente nuestro presidente, SHUR HQ VHQWLGR ÀJXUDGR KD atacado a todos los valores que encarnan los neoyorquinos y no representa nuestros intereses”, decía la convocatoria de la protesta.
En la manifestación se vieron carteles que, entre cosas, decían “Nunca mi presidente”, “Rechazar el odio”, “Echar a Trump” y “No al muro”, en alusión a la valla que ha prometido Trump levantar en la frontera con México.
En el lugar se reunió también un pequeño grupo de partidarios de Trump que intercambió gritos con el resto de los manifestantes,
sin que se produjeran incidentes.
A la protesta de Nueva York asistieron miles de personas, aunque muchas de ellas presentándose en el lugar en distintos momentos de la manifestación, que se prolongó por cuatro horas, a partir del mediodía.
Uno de los manifestantes que se dirigió a los reunidos apoyándose con un megáfono dijo que no era musulmán ni inmigrante indocumentado, pero dijo tener “roto el corazón” por el temor que generan entre sus amigos las políticos de Trump.
La de ayer fue la tercera manifestación consecutiva que tiene lugar en Nueva York desde el sábado pasado, que han reunido en cada caso a centenares de personas.O