La Opinión

HOY, TODOS SOMOS MÉXICO

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Las dramáticas escenas se repiten a lo largo de la capital mexicana y sus estados vecinos estremecid­os por el terremoto del martes pasado

La alegría y los aplausos con los cuales es recibido cada sobrevivie­nte rescatado contrasta con la angustiosa incertidum­bre de quién no sabe el destino de un ser querido y con el llanto ante la FRQÀUPDFLy­Q GH XQD PXHUWH

México está de luto ante la SpUGLGD GH VXV KLMRV 0p[LFR está de pie porque ya sabe ELHQ FyPR HQIUHQWDU HVWRV PRPHQWRV

Ya conoce estos embates de OD QDWXUDOH]D 6X JHQWH WLHQH la solidarida­d de la ayuda urgente, la esperanza que hay vida debajo de las piedras y OD IXHU]D SDUD UHFRQVWUXL­U \ VDOLU DGHODQWH

El temblor puso a prueba tanto el espíritu de los mexiFDQRV FRPR VX SUHSDUDFLy­Q SDUD HQIUHQWDU HVWRV FDVRV Parece que los ensayos y las prácticas para actuar de inmediato dieron un resultaGR SRVLWLYR

3DUD OD GLVFXVLyQ SRVWHULRU queda analizar los derrumbes GH HGLÀFLRV 6L HVWRV IXHURQ construido­s cumpliendo las normas, especialme­nte los OHYDQWDGRV GHVSXpV GH

Hay quienes se preguntan por qué no exigir que se apliquen las mismas exigencias a todo ORV HGLÀFLRV TXH D ODV WRUUHV TXH UHVLVWHQ FRQ ÀUPH]D

Incluso se habla de trasladar los mismos requerimie­ntos antisísmic­os a estados como Chiapas y Oaxaca, que el 7 de septiembre pasado VXIULHURQ XQ WHPEORU GHYDVWDGRU TXH GDxy \ GHVWUX\y FHUFD GH YLYLHQGDV

Eso requiere un comproPLVR SROtWLFR 7DQWR SDUD LPponer normas en estados con la venia de sus autoridade­s locales, como para entregar la ayuda necesaria a esas dos UHJLRQHV

6HUtD PX\ IiFLO GHMDU DEDQdonada­s las necesidade­s mayores en Chiapas y Oaxaca, causadas también por un terremoto, para dar la prioridad a la menos dañada capital PH[LFDQD 1R KD\ TXH UHSHWLU ROYLGRV KLVWyULFRV

1RV XQLPRV HQ HO GRORU \ en la ayuda a nuestros herPDQRV PH[LFDQRV

Esta es la hora de ser solidarios y aportar un granito de arena, en la medida que VHD SRVLEOH +D\ TXH WHQHU FXLGDGR 3UHFLVDPHQ­WH HVWH tipo de tragedias es cuando ORV HVWDIDGRUH­V DSURYHFKDQ OD generosida­d de la gente para llenarse los bolsillos con el FXHQWR GH UHFDXGDU IRQGRV SDUD D\XGDU D 0p[LFR

6L YD D GRQDU GLQHUR KiJDOR D XQD RUJDQL]DFLyQ GH FRQÀDQ]D FRPR OD &UX] 5RMD R 81,&() HQWUH RWUDV TXH WLHQHQ XQD UHSXWDFLyQ FRQRFLGD

Para los residentes de Los Ángeles esta tragedia tiene que ser un llamado a estar preparados para un terremoto y a conocer y seguir las recoPHQGDF­LRQHV RÀFLDOHV 1XQca se sabe cuando serán neFHVDULDV

Los acontecimi­entos como el temblor de México exponen nuestra vulnerabil­idad a heFKRV LQFRQWUROD­EOHV \ WHUULEOHV Ese es el momento en que lo mejor del ser humano salga D ÁRWH HVD HV OD HVSHUDQ]D GH VLHPSUH TXH UHWRUQD

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