Organizan la ayuda
OneOrlando Fund explica cómo entregará los recursos de donaciones a las víctimas del ataque al club Pulse
Sus manos todavía tiemblan y su voz se quebró al poco tiempo de comenzar a contestar las preguntas de un grupo de periodistas intrigados por conocer la experiencia de Edwin Rivera, sobreviviente de la masacre ocurrida en el club nocturno Pulse. Aunque logró escapar de las balas, Rivera aún sufre de ataques de pánico y de las heridas en su espalda, ocasionadas por personas que intentaban salir corriendo de aquél lugar.
Como Rivera, más de 300 personas se dieron cita en el Amway Arena hace unos días para participar de la reunión comunitaria convocada por los administradores del Fondo OneOrlando, quienes tendrán a cargo la distribución de los más de $23 millones donados para compensar a las familias de las víctimas y los sobrevivientes del acto de odio y terror que estremeció a Orlando y a toda la nación.
En la reunión, Kenneth Feinberg, quien fue seleccionado para administrar estos fondos a raíz de su vasta experiencia asistiendo a víctimas de tragedias como la del 11 de Septiembre y el Maratón de Boston, explicó de forma bastante precisa lo que hasta ahora denominó como el borrador del proto- colo a seguir para el proceso de distribución de fondos.
Feinberg aclaró que la elegibilidad para compensación y la suma de dinero que se repartirá se hará mediante cuatro categorías. La primera y de mayor prioridad son los familiares de las 49 personas que fallecieron en el club, seguida de las personas que sufrieron serias heridas físicas y que fueron admitidas en el hospital. Luego, siguen las personas que recibieron asistencia médica pero que no fueron hospitalizadas y por último las personas que permanecieron como rehenes dentro del club. Se especificó que los familiares de las personas que fallecieron y los que mayor tiempo estuvieron hospitalizados son los que recibirán una mayor cantidad de dinero.
El letrado señaló que el proceso será transparente y que se basará en lo sucedido a las víctimas en el momento del ataque y no en lo que pudiera sucederles en el futuro.
Feinberg destacó que para agilizar el proceso a la hora de hacer el reclamo, las personas no tendrán que suministrar récords médicos sino sólo proveer evidencia de dónde recibieron asistencia médica de emergencia y/o cuánto tiempo estuvieron hospitalizados. También se aclaró que la Policía tiene la lista de nombres de las personas que estuvieron dentro del local durante el tiroteo, lo que servirá para poder verificar los reclamos que se reciban.
Por su parte, Mai Fernández, directora ejecutiva del Centro Nacional para Víctimas del Crimen, comentó que durante el proceso de evaluación de cada caso se trabajará con tacto y sensibilidad.
Y es que para las víctimas de este perturbador evento no ha sido fácil sanar las heridas emocionales. Allí escuchando atento estaba el joven venezolano Víctor Guánchez, quien se recupera de dos heridas de bala en
en una pierna y dijo que aun no supera la traumática experiencia que vivió en lo que fue hasta ese día su centro de trabajo.
Durante la reunión, los participantes trajeron a colación multitud de aspectos que serán considerados por los administradores antes de establecer el protocolo final.
Una de las interrogantes de los presentes, que no pudo ser contestada, fue si las personas tendrán que pagar impuestos sobre el dinero que recibirán. También se recomendó a las familias de los fallecidos la importancia de designar a un representante que se haga cargo del proceso de reclamación. “Como no vamos a entrar en argumentos familiares, mi recomendación es que en casos de posibles conflictos, acudan a la corte. Cualquier disputa familiar retrasará la entrega del dinero y podría generar demandas entre los familiares”, dijo Feinberg.
El proceso se hará cautelosamente
También se explicó que desde ya las personas pueden comenzar a registrarse para recibir por correo los formularios para hacer su reclamo a tiempo.
Aunque en términos generales la información ofrecida fue bastante clara, la realidad es que algunas personas, como Edwin Rivera, mostraron estar un algo confundidos con las categorías de reclamos. Rivera señaló que aunque recibió golpes y heridas en su espalda por otras personas que cayeron sobre su cuerpo intentando salir del local, no fue hasta cuatro días después del evento que solicitó asistencia médica. Por su parte, Santos Rodríguez, hermano de una de las víctimas de Pulse, señaló que la información ofrecida por OneOrlando Fund fue bastante completa.
En esa misma línea, los jóvenes Adrián López y Javier Nava, quienes fueron testigos de la escena cuando el atacante disparaba a las víctimas, comentaron que se sienten ahora más esperanzados de que podrán contar pronto con la ayuda que necesitan. “Siempre visitábamos Pulse y nos sentíamos muy seguros. Cuando escuché los tiros pensé que era alguien haciendo una broma”, dijo el cubano López quien perdió esa noche a seis amigos muy cercanos. “Hace tres semanas que comencé a trabajar. Pero todavía no me siento bien”, dijo.
Por su parte, Nava quien recibió una herida de bala, destacó que tras esta reunión se sienten mucho más tranquilos ya que están más confiados de los pasos que deben dar para volver a retomar sus vidas.
Para concluir, el presidente de Orlando Magic y presidente de la Junta de OneOrlando Fund, Alex Martins, expresó que “tenemos que ser extremadamente cuidadosos con estos fondos. Además de tener una responsabilidad con los familiares de las víctimas y los sobrevivientes, tenemos una gran responsabilidad con las personas que han donado estos fondos. Estamos enfocados en evitar el fraude y mantener la transparencia en todo el proceso”.
Cabe destacar que el abogado Feinberg y su equipo, así como los miembros de la Junta de OneOrlando Fund, han donado su servicio y tiempo. También se informó que tras concluir la distribución del dinero se realizará una auditoría independiente.