Abuelitos hispanos están desconectados
Muchos no acceden a servicios de salud que cubran sus necesidades lingüísticas y culturales
El rápido crecimiento de la franja de personas mayores de 65 años dentro de la población hispana de EEUU ha generado una desconexión entre los proveedores de servicios y las necesidades lingüísticas y culturales de los que los reciben, según advierten los especialistas.
“Existe un conjunto de necesidades que podrían ser resueltas por los programas y servicios que están disponibles, pero muchos ancianos no acceden a esos servicios porque los desconocen o porque no entienden cómo solicitar esos beneficios”, dijo Yanira Cruz, directora ejecutiva del Consejo Nacional Hispano de Personas Adultas Mayores (NHCOA), en Washington D.C.
“Y el problema se acrecienta por la falta de comu- nicación efectiva entre los proveedores de servicios. Es común que los adultos mayores expresen que no se sienten cómodos con un cierto proveedor porque existe una barrera en la comunicación”, agregó.
Además, otro elemento a tener en cuenta es el cambio de actitud entre los hispanos en general sobre quién cuida a “los abuelitos” y dónde deben vivir las personas mayores.
En 2006, un estudio realizado por la organización no lucrativa HomeCare Op
tions decía que “los hispanos se van hasta el extremo para mantener a sus seres queridos en los hogares”. En aquel momento, el 88% de los encuestados prefería cuidar a los ancianos de la familia en las casas.
Cinco años después, ya había casi 70,00 hispanos en hogares de ancianos, representando poco menos del 5% de los 1.4 millones de personas de edad de toda etnicidad en esos hogares.
Aunque esa cifra parece baja, representa un 55% de aumento con respecto a 2006, según un estudio publicado por la Escuela de Medicina “Warren Alpert” de la Universidad Brown.
En 2014, el año más reciente del que existen datos completos, ya había 72,400 hispanos en hogares de ancianos, o el 5.3% del total de residentes en esas instituciones, según estadísticas del Departamento de Salud y Servicios Humanos de EEUU (DHHS).
La tendencia continuará, según DHSS, porque desde ahora hasta 2030 el número de hispanos mayores de 65 años (que hoy es de aproximadamente 2 millones) crecerá un 153%, superando a todos los otros grupos étnicos y triplicando el crecimiento de la población de residentes blancos de esa misma edad.
Y, a diferencia de años anteriores, esos adultos mayores latinos se mantienen activos.
“Antes asociábamos envejecimiento con inactividad, con falta de participación comunitaria, con dejar de ser parte del mundo productivo. Pero eso ha cambiado. Hoy los adultos mayores ven que entran en una fase significativa de sus vidas con posibilidades de realizar importantes contribuciones a la sociedad”, aseveró Cruz.
“Por ejemplo, muchos de ellos se reinventan a sí mismos profesionalmente, cuiindicó.. dan a sus nietos y comienzan sus propios negocios”,