Generosidad comunitaria brilla en Acción de Gracias
Ayuda generosa de la comunidad hace posible para muchos tener una celebración de Thanksgiving
La celebración del Día de Acción de Gracias no podría estar lista sin la cena con el pavo tradicional y la familia reunida. Así, familias necesitadas de la Florida Central se prestan a celebrar tras recibir el pavo y otras donaciones gracias a corazones generosos de esta comunidad.
Este año todo ello tiene un sentido particular para muchas familias puertorriqueñas, como la de María Cortés y su familia en la casa de su hermana en Kissimmee, tras haberse mudado a la Florida debido a los daños que el huracán María provocó en Puerto Rico.
“Con un poco de nostalgia porque sí se extraña Puerto Rico, cómo la pasábamos allá, pero también agradecida con Dios por esta oportunidad de estar aquí, tener salud, estar con mi familia y pensando en muchos que no tendrán como pasar con un pavo, porque está a 45 dólares el pavo en Puerto Rico”, comentó esta madre puertorriqueña, que recibió una canasta de alimentos de parte de la escuela de sus hijos y agregó que compró su pavo para prepararlo al estilo puertorriqueño junto a platos típicos de Puerto Rico como el arroz con gandules y ensalada de papas, entre otros.
A la Florida han llegado miles de boricuas tras el paso del huracán María, por ello la necesidad de asistir a estas familias es inmediata.
“Para mí, este Día de Acción de Gracias va a ser una tristeza bien grande, porque muchas familias que han llegado de Puerto Rico no van a celebrar con sus familias. Las cosas aquí no se celebran como se hace allá, que es una diferencia bien grande, allá se celebra con música y bastante fiesta familiar. Va a tener una nostalgia, muchos van a estar en hoteles, ¿qué celebración puede tener una familia en un hotel?”, dijo Olga González, comisionada de la Ciudad de Kissimmee.
Precisamente, la Ciudad de Kissimmee y el supermercados Sedano’s, repartieron 150 pavos y bolsas de alimentos a familias necesitadas en esta zona. Las familias fueron escogidas por varias agencias comunitarias locales, entre ellas Osceola Council on Aging, The Community Hope Center, Help Others Make Effort y Community Base Care of Central Florida.
Esta ayuda que inició hace varios años va dirigida a bendecir a otras familias, destacó Anael Hernández.
“Es una cosa bien bonita que nos permite ayudar a la comunidad. Comenzamos con 50 familias, el año pasado fue para 100 y este año para 150 familias. Somos bendecidos, porque no tomamos en cuenta ciertas cosas como que llegamos a casa y tenemos luz, agua, comida, pero hay otros que están pasando por ciertas circunstancias, no tienen esa suerte que tenemos y podemos poner un granito y ayudarlos a ellos”, dijo Hernández.
A una de las beneficiadas, Ramonita Irizarry, de 73 años, que vive sola, este reparto le permite tener su cena tradicional en su casa, que no podría tener de otra forma.
“Significa mucho. Vivo sola, porque aquí los gastos son muy grandes y cualquier ayuda que uno pueda tener es una bendición bien grande”, dijo emocionada esta originaria de Mayagüez, Puerto Rico.
Y a su vez dijo sentir tristeza y nostalgia por su isla natal: “doy gracias por mis bendiciones. Tengo a mis hermanos en Puerto Rico, tienen luz y buena salud, eso es lo importante”.
A su lado, Lidia Rivera, de 76 años, de Puerto Rico, se mostró agradecida por esta ayuda generosa “porque nosotros vivimos del cheque del Seguro Social y yo vivía con mi esposo pero al morir él, hace dos años, las cosas son más difíciles. Es una gran ayuda para mí, tengo dos hijos que son pastores, tengo una familia bonita”.
Mientras, Mercedes Delgado, retirada de 67 años, ecuatoriana, vive en St. Cloud, y enfatizó que este pavo le viene bien a ella y a su esposo en buena hora porque no tiene para comprarlo por su cuenta.
“Esta es una ayuda bien grande, porque este año es el único pavo que voy a ver en mi mesa, así que gracias a Dios. Voy a prepararlo al estilo ecuatoriano, haré relleno, arroz con gandules, pasteles
Doy gracias por la vida, la salud, la familia”, comentó.
Por su parte, José Álvarez, alcalde de Kissimmee, entregó la ayuda a las familias y reconoció la gran necesidad que existe en esta comunidad: “estas son familias necesitadas que viven en nuestra comunidad. Sin esto puede ser que no tuvieran su Día de Acción Gracias”.
Al mismo tiempo enfatizó sobre la urgencia de asistir a muchas familias recién llegadas a esta zona y dijo que sus esfuerzos junto a otros funcionarios electos se intensifica, sobre todo en el sector de vivienda.
“Como estamos viendo, ya estas familias que habían llegado a casa de un familiar ya están en las calles. Pensé que esto sería en 5 o 6 meses, cuando menos lo pensemos vamos a tener una catástrofe de personas en la calle. No tenemos dónde ponerlos. Esto va a ser una catástrofe, estamos viendo que son 140,000 familias que ya están aquí, y 130,000 que van a venir, es difícil”, dijo.
De igual forma coincidió el senador Víctor Torres: “muchas de estas familias están pidiendo ayuda en estos tiempos, se encuentran en este país, las iglesias están ayudándolos en esta época de Navidades, que es tiempo que la familias se unen. Es fuerte para nosotros, porque uno mira y quiere hacer más. Yo quisiera tener la autoridad, el poder para hacer más”.