FELIZ AÑO 2018
Increíble cómo el tiempo va pasando tan rápido, vamos a la velocidad del sonido, el tiempo parece que no alcanza para todo lo que tenemos que hacer. Por esto es tan importante planificar y tener nuestras metas y resoluciones lista para empezar, ya que de nada sirve tener nuestras metas si no actuamos.
Conozco a muchas personas que viven de intenciones y proyectos pero nunca han hecho nada en la vida. Tengo un pariente muy cercano a mí con este problema: lleva más de 40 años de casado y durante este tiempo de fin de año les habla a su esposa y a sus hijos de sus nuevos proyecto para el próximo año. Pero nunca ha hecho nada, ha desperdiciado su vida, nunca se decidió a actuar y lo más triste es que sus hijos hoy en día, adultos, hablan de lo mismo, proyectos y proyectos.
Año nuevo, vida nueva, hagamos nuestros planes y resoluciones, pero actuando y poniendo todo en manos de Dios. Como dicen las escrituras en Salmo 37:5 “Encomienda a Jehová tu camino, confía en Él y Él hará”. Sea la meta que sea, si no actuamos de nada sirve, tenemos que ser constantes y pidiendo a Dios que nos ayude. Entonces lograremos grandes cosas.
Hay personas que quieren empezar la dieta y bajar de peso, pero dicen que hasta después de las festividades y después alargan el proyecto después del día de resurrección y terminó el año y, por el contrario, aumentaron de peso.
Pero la meta y resolución más importante en nuestra agenda debe ser nuestro crecimiento espiritual. Recordemos que este mundo es pasajero, vamos de paso a la patria celestial, más tiempo de oración y comunión con nuestro Dios, aceptando a Jesucristo como nuestro Salvador y obedeciéndole en todo. Feliz año, se me portan bien y buen genio.