CELEBRANDO EL DÍA DEL AMOR

En estos días se ha estado celebrando el ‘día del amor y la amistad’, hemos visto movimientos de flores, chocolatinas, cenas románticas, joyas costosas y mucho más. ¿Pero esto es verdaderamente lo que significa el amor?

Muchas veces pensamos que esto es el amor, pero el verdadero amor es cuando se demuestra no con regalos ni lindas palabras sino con hechos. Hace algunos años ayudaba a un matrimonio que se iba a divorciar y le pregunté a la esposa cuál era el motivo de su divorcio. Me respondió que llevaban más de 15 años de casados y su esposo le decía todos los días que la amaba, pero que nunca se lo había demostrado. En el verdadero amor hay sacrificio, compromiso, ayuda, no hay envidia, nunca hace lo suyo.

El amor de Dios por nosotros no ha sido de palabras sino de hechos, nos ha dado la vida, nos hizo a su imagen y semejanza, se hizo hombre para ser humillado, maltratado, traicionado y crucificado. Todo por el amor a nosotros, como dicen las escrituras en Juan 3:16: “Porque de tal manera amó Dios al mundo que ha dado su hijo unigénito para que todo aquel que Él cree no se pierda mas tenga la vida eterna”.

De igual manera nosotros deberíamos demostrar nuestro amor a Dios, no con palabras sino con hechos, haciendo su voluntad y obedeciéndole en todo. Dice su palabra: “por qué me llaman Señor y no hacen mi voluntad”. Hemos creado un evangelio tipo ‘buffet’, lo que me conviene y lo que me gusta, eso hacemos. Nuestra relación con Dios debería ser la misma siempre, el Señor debería ser el número uno en nuestra vida. Vamos a celebrar todos los días pero con hechos, reciba a Cristo como su Salvador.

Se me portan bien y buen genio.