Voto boricua y castigo a Trump
Latinos y puertorriqueños en la Florida Central podrían volcarse hacia los demócratas en respuesta al trato dado a Puerto Rico
Luciam Báez, de 38 años, dice que se registró sin afiliación partidista. Lleva dos años viviendo en Hanes City, una pequeña ciudad al noroeste de Orlando. Ella es puertorriqueña y las elecciones en su tierra natal son muy distintas. Votó el 28 de agosto pero no por algún candidato pues estaba registrada como no partidista. No sabe muy bien cómo funcionan los partidos. Ella es de los 3.5 millones de votantes en Florida sin afiliación de partido, el electorado de más rápido crecimiento en el Estado del Sol.
En Puerto Rico, Báez solía ser del Partido Nuevo Pro- gresista, entidad política que muchos relacionan con el Partido Republicano. Pero ahora se cambiaría a demócrata porque “me voy a registrar al partido contrario de Donald Trump”, afirmó categórica la madre puertorriqueña, que está molesta y dolida con la respuesta que la administración del presidente brindó después del desastre que el huracán María dejó en la Isla del Encanto.
Así como Báez, miles de boricuas están molestos por el trato que el presidente Trump le dio a Puerto Rico después del embate ciclónico. Cientos de miles se verán motivados para salir a las urnas y mostrar ese enojo por medio de un voto de castigo, no solo a Trump pero también a los republicanos. Y esas cifras se muestras en el registro de electores. Decenas de miles de votantes en Florida se han inscrito en los últimos meses. El efecto que provoquen estos nuevos electores puertorriqueños dependerá en gran medida de su participación el 6 de noviembre y servirá para enviar un mensaje claro de su molestia e indignación.
“Nosotros debemos entender que Donald Trump es un movilizador y crea mucho enojo en la gente, para marchas y ese tipo de cosas, pero lo que tenemos que asegurarnos es que el 6 de noviembre ese coraje de la gente se convierta en votos. Desafortunadamente a la gente le afecta más lo que le toca de cerca, la gente estaba muy molesta en construir una pared en la frontera, pero los puertorriqueños no salieron a votar por eso. Pero cuando tú hablas de tu mamá, tu tía, tu hermana, tu primo que murió esperando servicios de salud, y que el responsable de eso se atreva a decir que FEMA tiene ‘A’, ya eso nos pone en un ataque personal”, dijo Jimmy Torres Vélez de Boricua Vota, organización que trabaja fuertemente para sacar a los puertorriqueños a votar.
Florida tiene 13 millones de votantes, usualmente es un estado cambiante, sin una tendencia fija y con una larga historia de elecciones apretadas. El
gobernador Rick Scott ganó la reelección en 2014 por un margen de menos de 65,000 votos.
En el Condado de Osceola, vecino de Disney World, y donde una gran mayoría de puertorriqueños han sentado su hogar, las tendencias electorales muestran que las cifras favorecen a los demócratas. Según un informe de septiembre, este condado tenía 3,181 independientes que se convirtieron en demócratas en comparación con 349 de hace cuatro años. Pero los cambios siguen demostrando que Florida es un estado ‘swing’, en constante movimiento de partidos. Por ejemplo, 1,913 votantes de Osceola se cambiaron de demócratas a no partidista, 817 demócratas se convirtieron en republicanos y 588 republicanos se convirtieron en demócratas.
Según Doug Head, actual jefe del Comité del Partido Demócrata en Florida, el fenómeno de Andrew Gillum, un político progresista que sorprendió al ganar las primarias demócratas para gobernador en el Estado del Sol, entusiasma a muchos votantes y afecta otras contiendas en el Condado de Orange. “Ciertamente el entusiasmo en la comunidad negra está promoviendo el entusiasmo de salir a votar de todos los sectores incluidos los hispanos y esto beneficia a los demócratas”, aseguró.
La ola azul, como la han llamado los demócratas, también echa la culpa a la administración Trump de no hacer nada por el cambio climático, hecho que está provocando, dicen, huracanes más violentos y más seguidos. Además, Estados Unidos se ha salido del Acuerdo de París, que pretende evitar un cambio climático peligroso.
“Creo que es un tema de peso para la comunidad latina que está consciente de los cambios climáticos y de la situación que estamos sufriendo con los huracanes y la gran mayoría somos afectados por estos cambios y queremos mejores instrumentos de energía eficiente. Las personas están preocupadas, interesadas y quieren ser escuchadas”, dijo Yanidsi Vélez-Bonet, de Hispanic Federation, durante un foro comunitario donde se habló del cambio climático a un año del huracán María.
Zoraida Ríos-Andino, integrante de Misión Boricua, dijo que el enojo hacia Trump va a jugar un rol importante para que la gente salga a votar contra los republicanos.
“No respondió como debía responder. Cuando Haití tuvo la catástrofe del terremoto, Estados Unidos envió varios barcos. A Puerto Rico solo enviaron un barco. Yo creo que el gobierno americano en general le ha fallado a Puerto Rico y esto sí va a impulsar a los puertorriqueños a salir a votar”, agregó Ríos Andino. Ella consideró que con toda la campaña que se ha hecho para educar al público, la gente debe estar más consciente: “nosotros como Misión Boricua hemos hecho tantos eventos para explicar cómo funciona el voto, qué significan las enmiendas constitucionales, eso y el coraje que la gente siente por la respuesta ante el huracán María lo van a pagar grandemente los republicanos”.
Betsy Franceschini, directora de Hispanic Federation en Florida, dijo que Puerto Rico no ha recibido un trato igualitario para los 3.5 millones de ciudadanos estadounidenses que viven en la isla y eso lo reconocen los puertorriqueños que viven en el continente de EEUU.
“Fue una situación muy dolorosa, porque sufrimos una pérdida de casi 3,000 personas como consecuencia del huracán y la falta de servicios de luz y agua potable. Entonces el pueblo puertorriqueño y la diáspora tenemos una fuerza con nuestro voto de hacer unos cambios para mejorar nuestras necesidades y asegurarnos de que nos escuchen, que no nos falten al respeto. Es importante para el votante que miren bien la trayectoria del candidato y lo qué ha hecho por Puerto Rico antes de María”, finalizó Franceschini.l