Trump pretende eliminar a las minorías e inmigrantes del Censo
Ya se iniciaron las demandas contra la decisión de añadir una pregunta de ciudadanía al Censo que se realiza cada 10 años; alegan que es inconstitucional y que causará miedo.
Antes que su gobierno anunciara la intención de preguntar la ciudadanía de todos los que llenen el formulario del Censo de Población de 2020, la campaña de reelección del presidente Donald Trump ya le había preguntado a sus seguidores si querían que esto se hiciera.
El lunes de la semana pasada, la campaña de Trump envió a su lista de seguidores un email con la pregunta: ¿Quiere usted que el próximo Censo pregunte a la gente si son ciudadanos?
Esta no es la forma en que se han hecho las decisiones sobre el Censo desde el nacimiento de la nación, dijo Arturo Vargas, director ejecutivo de NALEO, organización no partidista que promueve el voto y la representación latina a todos los niveles de gobierno.
“Yo he tratado de entender el por qué de esa decisión”, dijo Vargas. “El gobierno federal tiene la responsabilidad de asegurar que el censo haga un conteo preciso de la población y del país”.
El email enviado a sus seguidores y la falta de estudio sobre añadir la pregunta de ciudadanía -cuando cada pregunta del Censo normalmente se prueba y analiza por años antes de decidirse- solo conllevan a una explicación, dijo Vargas.
“Es un motivo partidista y político”, dijo. “Creo que quienes no gustan de la comunidad latina, que va a ser la más afectada, quieren que desaparezca. Y si el Censo no nos cuenta, desaparecemos del sistema político”.
California y Nueva York van a las cortes
Ha sido una tradición desde
La población del país sube y el gobierno es responsable de su conteo, estado por estado.
el nacimiento de los Estados Unidos que el Censo de población que se realiza cada diez años cuenta absolutamente a todas las personas que viven dentro del territorio, sin importar su estatus migratorio.
Del conteo que se hace cada diez años con el cambio de década (1990, 2000, 2010 y el próximo, 2020), depende la enumeración correcta de cuántas personas viven en el país, cuántas en cada estado y, por tanto, cómo deben distribuirse los recursos federales así como los distritos electorales.
El gobierno de Donald Trump ha propuesto una medida que, según numerosos expertos, rompería con esta tradición al preguntar a todos los que llenen el cuestionario de población cuál es su ciudadanía.
El resultado, según los expertos, es que esta pregunta causaría temor en las comunidades inmigrantes, que no llenarían el cuestionario, llevando a un subconteo y menos recursos federales y de representación política para la comunidad latina.
Gran parte de la comunidad inmigrante vive en familias mixtas, en las que puede haber indocumentados, residentes o ciudadanos. Si un padre indocumentado no llena el Censo, su hijo ciudadano tampoco recibe un espacio en la escuela ni el estado en el que viven, los fondos para carreteras, por ejemplo.
Para los procuradores de California y Nueva York, que el pasado martes anunciaron la presentación de sendas demandas contra el gobierno federal, la propuesta es simplemente ilegal e inconstitucional.
“La Constitución dice que el Censo debe enumerar a la población, y estas mismas palabras están en la Constitución. No dice ciudadanos. Y desde 1790, el Censo estadounidense ha contado a ciudadanos y no ciudadanos”, dijo este martes el procurador de California Xavier Becerra.
El secretario de estado de California, Alex Padilla, dijo que el anuncio ignora los propios protocolos del departamento de Comercio y décadas de política bipartidista, en las que presidentes y gobierno tanto demócratas como republicanos estuvieron de acuerdo en que la pregunta no debía hacerse en el conteo decenal.
Reacciones negativas
Tras anunciarse que el gobierno de Donald Trump incluirá una pregunta sobre ciudadanía al Censo Decenal de 2020, numerosas voces a lo largo y DQFKR GHO SDtV FDOLÀFDURQ VX decisión como “puramente política” y anticiparon que millones de familias inmigrantes evitarán participar.
Dale Ho, director del Proyecto de Derechos del Voto de la ACLU dijo que por algo cinco exdirectores del censo, en gobiernos republicanos y demócratas, se han opuesto a esta decisión.
Thomas Saenz, presidente y abogado general de la Fundación Méxicoamericana para la Defensa Legal y Educación (MALDEF), dijo que emprendería también un ataque legal contra la decisión y además, llamó a la renuncia del secretario de comercio Wilbur Ross, cuyo departamento administra el Censo.
“Gobiernos de ambos partidos se han negado por décadas a politizar este mandato sagrado de la Constitución y han optado por el uso de méWRGRV FLHQWtÀFRVµ GLMR 6DHQ] “Wilbur Ross debe renunciar”.
Sarah Huckebee, secretaria de Prensa de la Casa Blanca, dijo durante su intervención diaria ante la pregunta que la pregunta “se había hecho antes y solo se eliminó en 2010”.
Objetivo: hacer invisible a la comunidad latina
Al anunciar una decisión que ningún gobierno demócrata o republicano llevó a cabo anteriormente, el gobierno de Donald Trump no sólo está politizando un proceso que debería estar más allá de partidismos, sino que está atacando directamente a la comunidad latina e inmigrante, dijeron varios observadores.
Una pregunta sobre ciudadanía en un ambiente de temor en la comunidad inmigrante y las muchas familias de estatus mixto que existen en el país, podría llevar a un Censo menos exacto, en el que falten por contar muchas personas, perjudicando a las regiones del país con mayor población inmigrante.
“El objetivo es que las familias con personas indocumentadas y familias mixtas