EL PAÍS FINGE IGNORANCIA ANTE LA CARAVANA DE INMIGRANTES
Es preocupante la nula reacción del país al drama de la caravana de inmigrantes de Centroamérica. La única voz que se escucha es la del presidente Donald Trump, quien quiere cerrar la frontera y negarles el asilo político.
Hay unas cosas básicas que cualquier persona puede entender sobre los miles de inmigrantes de Honduras, El Salvador y Guatemala que viajan rumbo al norte. Ellos no vienen de vacaciones a Miami ni a darse una vuelta por Nueva York. Huyen del hambre, la falta de trabajo, la violencia desenfrenada y la extrema pobreza.
La izquierda de este país también ha estado muy callada en torno a la caravana. ¿Será que ya se han olvidado en este país de lo que es tener hambre y frío, estar sin techo y ser perseguidos por sus creencias y opiniones?
Los inmigrantes de Europa vinieron a este país por las mismas razones que impulsan a los centroamericanos hoy. Los europeos también buscaban casa, trabajo, abriJR \ XQ ÀQ D OD SHUVHFXFLYQ En Estados Unidos, supongo, los únicos que aún saben lo TXH VLJQLÀFD VHU SREUH \ WHQHU hambre es la generación de la Gran Depresión de 1929 y de ellos ya casi no quedan muchos. Estados Unidos siempre ha sido un faro de esperanza y libertad. Es la razón de ser de este país y no debe ahora hacerse a un lado ese legado y cerrar la frontera a los que vienen huyendo de las precarias condiciones en otros países. Los inmigrantes son la sangre de este país y sin inmigrantes este país dejara de ser grande.
El fenómeno de la caravana centroamericana es una crisis humanitaria, no una invasión. Estos nuevos inmigrantes, que vienen de este mismo continente llamado América, buscan un lugar seguro en donde vivir con sus hijos. Debemos alzar la voz para que se les permita el asilo político.
Se debe recibir a los a los inmigrantes de la caravana, darles asilo político y distribuirlos en diferentes ciudades y regiones del país. Unos 2,000 inmigrantes podrían ser enviados a Chicago, ya que nuestra ciudad está perdiendo población cada año. Así se logró hacer con los refugiados de Vietnam y Camboya, que fueron reubicados en varias partes del país.
Estados Unidos, por ser una superpotencia y tener una gran economía, sí afectar las economías y las políticas de países más débiles como los de Centroamérica. Cerrar la frontera a la caravana y negarles asilo político, como exige Trump, sería una absurda hipocresía.
Y aquí cabe una crítica a México, que ha enviado a millones de sus connacionales a este país y ahora les forma a los centroamericanos una valla policiaca para negarles el paso. Hacer ese trabajo sucio es el peor servilismo ante un Trump racista que ha insultado constantemente a los mexicanos. Como dijo 3RUÀULR 'td] SREUH 0P[LFR tan lejos de Dios y tan cerca de Estados Unidos.o