EL SALDO DE UNA INVESTIGACIÓN
La campaña de Donald Trump se benefició con el conocimiento de las acciones originadas desde Rusia para influir en el resultado de las elecciones presidenciales de 2016. Y el presidente Trump intentó bloquear la investigación de cómo esas acciones contribuyeron a su victoria electoral. El testimonio público de Robert Mueller ante del Congreso no cambió esta realidad ni avanzó su resolución sustancialmente.
No se cumplieron las expectativas demócratas de que la presencia de Mueller iba a GDU ÀOR D XQ UHSRUWH GH PIV GH SIJLQDV GH PRGR Vxàciente para impulsar su estrategia de desgastar a Trump. Tampoco se logró la aspiración republicana de destruir la labor del investigador y apuntalar la teoría de la Casa Blanca de que todo fue una conspiración contra el presidente.
El testimonio público fue legalista, repleto de negativas por parte de Mueller a salirse de los límites impuestos por el reporte, por sí mismo y por el Departamento de Justicia. Se notaba que Mueller hubiera preferido no estar allí. Al presentar el reporte dijo que HVDV HUDQ VXV SDODEUDV ÀQDOHV pero desde entonces hasta hoy éstas habían sido interpretadas según el gusto partidista, especialmente por Trump.
Las audiencias ante el Congreso eran necesarias para DFODUDU \ FRQÀUPDU ODV Dvhveraciones contenidas en el informe. Es la misión supervisora del Legislativo, y el deber de los congresistas que representan las inquietudes de los votantes sobre la integridad del proceso electoral.
Pero ello no cambió lo que ya se sabía. El respaldo ruso a la campaña presidencial republicana cumplió los deseos del líder ruso Vladimir Putin
Mueller
de que Trump fuera el presidente por su antipatía a Hillary Clinton y en aras de que se levantaran las sanciones impuestas por Barack Obama. El apoyo ruso se manifestó de varias maneras para que individuos cercanos a Trump lo supieran. Pero no hubo a juicio de los investigadores VXÀFLHQWHV SUXHEDV SDUD Ghterminar que hubo una conspiración. Donde hay cenizas hubo fuego, pero en este caso las cenizas no llegaron a involucrar al candidato.
Se sabe que Trump quiso detener, obstruir, la investigación. El presidente no fue acusado de ello solamente por la orden de los superiores de Mueller de que eso no se puede hacer con un presidente en funciones. Aunque Vt VH SRGUI HQMXLFLDU D 7UXPS una vez que esté fuera de la Casa Blanca.
Con todas las irregularidades reveladas por el reporte creemos que es hora de dar YXHOWD D OD SIJLQD HQ OR SROTWLCO. El pasado no se cambia. El comportamiento de Trump, repleto de manipulación, engaño \ GLYLVLRQLVPR QR FDPELDUI Y aunque muchos desean el impeachment presidencial, una posibilidad incierta, lo crucial ahora es salvar la integridad de la elección presidencial de 2020.
Preocupa que la intervención extranjera sigue siendo una amenaza. La investigaFLYQ GH 0XHOOHU FXPSOLUI Hqtonces con su propósito solo si lleva a que se restaure la FRQÀDQ]D GHO YRWDQWH HQ HO proceso electoral, sabiendo lo ocurrido, para que esté alerta y se evite una repetición del pasado.o