AHORA ES BIDEN VS TRUMP
El senador Bernie Sanders se retiró de la contienda presidencial hace poco más de una semana; unos días atrás, expresó su apoyo (“endorsement”) al candidato Joe Biden. Y este lunes, el expresidente Barack Obama, en un regreso al centro de los acontecimientos, hizo lo propio, alentando a toda la gente de buena voluntad a unirse para la tarea histórica que espera a la nación estadounidense.
Quizás la contribución más importante de Sanders fue su concepto de que Donald Trump no es solo el “peor” presidente. Es “el más peligroso”.
Los acontecimientos, cada día, demuestran el porqué. Una barbaridad sigue a la otra, a cual más absurda, más destructiva, más increíble.
Un día, Trump declara que son los estados, individualmente, y no el gobierno federal, quienes deben luchar contra el COVID-19. Así justifica el monumental fracaso de su administración en suministrar exámenes, máscaras, equipo profesional para médicos y enfermeras.
Al día siguiente, insultando a los periodistas que cubren la Casa Blanca, reclama para sí poderes “totales”, sí, con esta palabra. Inmediatamente, amenaza Twitter a los gobernadores, acusándolos de motín y pretendiendo ser el capitán en la película “Mutiny on the Bounty”.
Por eso es tan importante que los demócratas se hayan afianzado como partido. Que no existan en su seno tantos resquicios y divisiones como en años anteriores. Que todas las fracciones se hayan unido para derrotar al rival común, Trump.
Momento de unidad
«En medio de toda esta delicada situación, da un poco de alivio ver que los demócratas al fin se están alineando».
La tarea es difícil, porque tenemos como presidente a un personaje autoritario sin escrúpulos y con ansias inagotables de poder. A un 40% de la nación que se ha dejado llevar por su retórica, por encima de la lógica. A un Partido Republicano que debería cambiar su nombre por el de Trumpista, y que ha forjado una barrera protectora alrededor de su líder, con posiciones cada vez más extremas y actitudes cada vez más agresivas y antidemocráticas.
Porque es necesario avalar y defender a los verdaderos héroes de esta pandemia, cuyo fin aún no está a la vista: los profesionales de la salud, los conductores de camiones de comida, los empleados de almacenes, los limpiadores, los trabajadores del campo y muchos más. Porque para lograr la recuperación económica después de la crisis es esencial procurar empleos para los millones que los perdieron, cobertura médica para todos los estadounidenses a fin de protegerlos del retorno del virus. Y muchas otras metas que no preocupan ni a Trump ni a su entorno.
Porque ellos solo quieren el poder.
La unidad el Partido Demócrata y su campaña electoral es un pequeño consuelo a una nación afligida. Le damos la bienvenida.l