Trabajadores indocumentados que denuncien violación de derechos laborales ya pueden solicitar alivio migratorio
Esta acción diferida protege contra la deportación y otorga permiso de trabajo temporal a víctimas de abuso laboral
Muchos trabajadores inmigrantes enfrentan abuso laboral en su lugar de empleo, pero callan por temor a que por represalia sean despedidos por el patrón o deportados por las autoridades migratorias.
Ahora, para ellos hay protecciones que podrían sacarlos de las sombras si denuncian violaciones a sus derechos laborales.
La acción diferida frena la deportación, otorga permiso de trabajo temporal por al menos dos años –hay que demostrar necesidad económica para el empleo- de manera de que estas personas puedan continuar laborando mientras que su denuncia sigue en curso.
Esta medida, que surge durante la administración del presidente de Estados Unidos Joe Biden, ha sido una lucha constante de organizaciones locales y nacionales que abogan por los derechos de los trabajadores.
En un memorando de octubre de 2021, el secretario del Departamento de Seguridad Interior de Estados Unidos, Alejandro Mayorkas, señaló que la agencia consideraría las solicitudes de protección de acción diferida para los migrantes que ayuden en investigaciones laborales, pero no estableció sino hasta este 2023 una política detallada sobre cómo esto se haría.
El viernes 13 de enero, el de Seguridad Interior de Estados Unidos (DHS, por sus siglas en inglés) anunció una guía para trabajadores que experimentan abuso laboral a fin de que puedan solicitar una protección migratoria.
DHS anunció un proceso mediante el cual los trabajadores inmigrantes que son víctimas o testigos de violaciones laborales en el lugar de trabajo pueden beneficiarse de un alivio migratorio temporal.
Los abusos laborales incluyen acoso sexual, discriminación, condiciones de trabajo inseguras, amenazas, represalias y robo de salario, por mencionar algunos.
La decisión del DHS de otorgar acción diferida caso por caso a trabajadores inmigrantes facilita investigar más a fondo las violaciones en el lugar de trabajo, según la agencia.
Cabe destacar que estos trabajadores deben explicar por qué buscan la acción diferida, incluida una carta de una agencia laboral o de empleo que respalde la solicitud, y otros documentos que ayudarán a los funcionarios a decidir si ofrecen o no un alivio migratorio.
Empleadores se aprovechan del miedo de los trabajadores
Según Laura Garza, directora del Centro de Trabajadores de Arise Chicago, los trabajadores inmigrantes son sistemáticamente empleados por patrones que crean una cultura de miedo y luego se aprovechan del miedo de los trabajadores.
“Este miedo creado por el empleador obstaculiza el derecho legal de los trabajadores a defender sus derechos, mejorar las condiciones de trabajo y organizarse en el trabajo”, destacó Garza en una conferencia de prensa llevada a cabo en días recientes en la Plaza Federal, en el centro de Chicago, que fue parte de una Semana Nacional de Acción de organizaciones de derechos de trabajadores e inmigrantes en todo el país.
Sofía Portillo, una trabajadora doméstica de Chicago, alzó su voz por los trabajaDepartamento
dores inmigrantes que están en las sombras y que no denuncian los abusos laborales por miedo a la deportación y a la separación de familias.
“Los empleadores sin escrúpulos que se aprovechan de la vulnerabilidad de los trabajadores no-ciudadanos dañan a todos los trabajadores y perjudican a las empresas que cumplen con las reglas”, dijo el secretario de Seguridad Interior, Alejandro Mayorkas.
La acción diferida protege a los trabajadores no-ciudadanos de las amenazas de represalias relacionadas con la inmigración por parte de los empleadores explotadores.
“Aun siendo indocumentados las leyes nos protegen porque somos trabajadores y somos dignos de respeto”, señaló Portillo.
Para Karen Álvarez, organizadora con la organización Warehouse Workers for Justice, es crucial garantizar las protecciones y salvaguardar a los trabajadores que viven con miedo de ser objeto de represalia, “no solamente de perder su trabajo, pero también de la posibilidad de ser deportados, con demasiada frecuencia esos trabajadores acuden a nosotros y nos cuentan de las condiciones precarias que soportan en su trabajo y su sustento depende de estos trabajos”.l