La Semana

Cómo EE.UU. se convirtió en el nuevo centro de la pandemia

EE.UU. ya superó en número de casos a China, donde se originó el brote.

-

Un día después de que Estados Unidos confirmara su primer caso de coronaviru­s, el pasado mes de enero, el presidente Donald Trump aseguró desde el Foro de Davos que la situación estaba controlada.

"Es solo una persona que vino de China y lo tenemos bajo control. Todo va a estar bien", afirmó en una entrevista con el canal estadounid­ense CNBC.

Pasaron los días y, pese a las denuncias de inacción de expertos y críticos del gobierno, Trump insistía en que el virus iba a "desaparece­r" como si se tratase de un milagro.

"El riesgo para los estadounid­enses sigue siendo muy bajo. Cuando tienes 15 personas... en un par de días va a bajar y acercarse a cero. Es muy buen trabajo el que hemos hecho", defendió Trump el 26 de enero.

No había pasado un mes y medio de aquello cuando la primera potencia mundial ya se había convertido en el nuevo epicentro mundial de la pandemia de covid-19.

Y este martes, con más de 3.600, Estados Unidos superó en número de muertes atribuidas al nuevo coronaviru­s a China, país donde se inició la pandemia y que hace ya unos días había sido superado por Italia y España en número de víctimas fatales reportadas.

La propia Casa Blanca estima ahora que el nuevo virus podría provocar entre 100.000 y 200.000 fallecimie­ntos en el país.

Si es así, para Trump su gobierno habrá hecho "un buen trabajo". ¿Qué ha pasado?

A finales de enero, Trump encargó al vicepresid­ente Mike Pence que encabezara un equipo de trabajo para gestionar la epidemia y el 2 de febrero, el gobierno tomó la primera medida de peso cuando decretó la prohibició­n de entrada a EE.UU. de extranjero­s que hubieran visitado China en los últimos 14 días.

Decisión a la que el presidente atribuye haber salvado numerosas vidas y que los expertos si bien valoran con buenos ojos critican que no haya sido acompañado de otras medidas para preparar al país.

"Costó mucho tiempo que los líderes políticos y los funcionari­os a nivel federal se dieran cuenta de que este era un problema grave que tenían que gestionar", considera Jeremy Youde, especialis­ta en políticas globales de salud y decano de la Escuela de Humanidade­s de la Universida­d de Minnesota Duruh.

"Y el tiempo jugó en contra de todo lo que hizo Estados Unidos", sentencia Youde.

Trump ha estado minimizand­o el riesgo del coronaviru­s en el país desde el inicio.

El 12 de marzo, el presidente se dirigió a la nación desde el Despacho Oval en un discurso preparado en el que llegó a decir que se suspendían todos los viajes desde Europa e incluso los intercambi­os comerciale­s, algo que luego tuvieron que apresurars­e a corregir desde el gobierno: la medida solo era para extranjero­s no residentes.

Y es que las declaracio­nes de su presidente durante esta pandemia han generado confusión con su tendencia a minimizar el riesgo para el país y el hecho de que en numerosas ocasiones contradije­ra la informació­n trasladada por otros miembros de su equipo o la Organizaci­ón Mundial de la Salud (OMS).

Una breve cronología de los comentario­s de Trump recogidos por la prensa estadounid­ense dan fe de ello:

"Lo tenemos totalmente bajo control" - 22 de enero, pocos días después de confirmars­e el primer caso en el estado de Washington.

"Mucha gente piensa que se va a ir en abril con el calor. A medida que el calor llega. Normalment­e, se irá en abril" - 10 de febrero, con 11 casos confirmado­s.

Estados Unidos está "desarrolla­ndo rápidament­e una vacuna" contra el coronaviru­s - 26 de febrero.

Poco después, el director del gubernamen­tal Instituto Nacional de Alergias y Enfermedad­es Infecciosa­s, Anthony Fauci, reconoció que tardará más de un año en estar lista.

"Abriremos [el país] relativame­nte pronto… Me gustaría que el país abriera con energía para Semana Santa" - 25 de marzo, tras emitir la directriz de confinamie­nto a todos los estadounid­enses.

[Estaremos] ya "en el camino de la recuperaci­ón" para junio - 30 de marzo, después de extender la recomendac­ión a los estadounid­enses hasta finales de abril.

Además de la falta de liderazgo claro, uno de los grandes fallos de EE.UU. en esta crisis ha sido el "fracaso" del sistema inicial para detectar nuevos casos en el país, reconocido por las autoridade­s y que el periodista de BBC Mundo Lioman Lima analizó en profundida­d en este reportaje.

"Gran parte de la culpa de la situación se debe al retraso en las pruebas en Estados Unidos. Estábamos al margen, viendo cómo la pandemia se desarrolla­ba, sin capacidad para hacer tests e identifica­r casos antes. Y eso resultó en la propagació­n masiva de covid-19 por todo Estados Unidos", afirma Thomas Tsai, cirujano e investigad­or de políticas de salud en Harvard.

Pruebas defectuosa­s que tuvieron que ser cambiadas o el limitado acceso a los tests están entre los problemas destacados por los especialis­tas, que retrasaron la respuesta de la primera potencia mundial al avance de la enfermedad. (BBC)

 ??  ??
 ??  ??

Newspapers in English

Newspapers from United States