Asesor de Trump en inmigración quiere que más países otorguen asilo
Asilo. Una de las principales prioridades del presidente Donald Trump en materia de inmigración si es reelegido sería usar el modelo de los acuerdos alcanzados con gobiernos centroamericanos para hacer que países de todo el mundo atiendan solicitudes de asilo de personas que piden refugiarse en Estados Unidos, dijo un alto asesor el viernes.
Stephen Miller, arquitecto clave de las políticas migratorias de Trump, dijo que los acuerdos ayudarían a acabar con el “fraude de asilo, la compra de asilo y el abuso del asilo a nivel global”.
En una entrevista con The Associated Press, Miller también pronosticó una ofensiva más amplia contra las jurisdicciones “santuario” que limitan su cooperación con las autoridades migratorias federales, y que para ello el gobierno utilizaría “todo su poder, recursos y autoridad”. Prometió que habrá más medidas en favor de una inmigración legal “basada en los méritos”.
Los “Acuerdos Cooperativos de Asilo” que el gobierno alcanzó en 2019 han permitido que las personas de El Salvador y Honduras que desean asilo sean enviadas por avión a Guatemala para que lo pidan en ese país, negándoles una oportunidad de solicitarlo en Estados Unidos.
De noviembre a marzo, cuando la pandemia de coronavirus obligó a suspender los vuelos a Guatemala, sólo 20 de 939 hondureños y salvadoreños enviados por avión solicitaron asilo allí. Casi todos regresaron a su patria, en lo que llegó a conocerse como “deportación con escala”.
Al igual que muchas políticas de Trump que han transformado drásticamente el sistema migratorio de Estados Unidos, los acuerdos bilaterales están siendo impugnados en los tribunales. Los críticos hacen notar que los solicitantes de asilo son enviados a países con elevados niveles de violencia y pobreza y poca infraestructura para manejar dichas peticiones.
El coronavirus azotó Estados Unidos antes de que comenzaran los vuelos a Honduras y El Salvador, por lo que no han iniciado.
Trump y su rival demócrata Joe Biden le han dado escasa atención a la inmigración en sus campañas de 2020, a pesar de una acalorada discusión durante el debate del jueves desatada por la noticia de que abogados nombrados por la corte no han logrado hallar a los padres de 545 niños que fueron separados de sus familias poco después de que comenzó el gobierno de Trump.
El mandatario aún no esboza en detalle sus prioridades en inmigración para su segundo período en caso de ser reelegido, aunque ha planteado abiertamente la posibilidad de intentar revocar un derecho constitucional a ser ciudadano estadounidense por nacimiento.