San Diego Union-Tribune

EL DOMINGO DE SUPER BOWL SERÁ PARA ADMIRAR A... LOS CACHORROS

- DIANE BELL pawtograph­s Bell es reportera del U-T.

Este domingo es 12 de febrero, un día clave para los aficionado­s del deporte de Estados Unidos.

El campo de futbol americano estará meticulosa­mente preparado, las porristas animarán al público y los jugadores se prepararán, y entonces empezará a volar la melena.

Sí, es el Puppy Bowl anual, la competenci­a en la que participan ladradores de líneas, receptores grandes y perros guardianes.

Se ha reclutado a jugadores de cuatro patas de todo el país para el XIX Puppy Bowl, que se transmitir­á antes del Super Bowl en Animal Planet de 11 a.m. a 2 p.m. PST y simultánea­mente en Discovery Channel, TBS, HBO Max y discovery+.

Tres de los 122 participan­tes de 67 refugios de animales de 34 estados tienen lazos con San Diego. Una mezcla de terrier procede del Humane Society de San Diego, un refugio que participar­á por primera vez. Dos cachorros de raza salchicha proceden del Centro de Animales Helen Woodward de Rancho Santa Fe.

Es la primera vez que dos hermanos juegan juntos en un equipo del Puppy Bowl, dice Jessica Gercke, portavoz de Helen Woodward.

El objetivo, por supuesto, es conseguir que estos jugadores de cuatro patas sean adoptados, si es que no lo son ya, teniendo en cuenta que el Puppy Bowl se pregrabó en octubre. Se ha diseñado para destacar el exceso de cachorros huérfanos, abandonado­s, liberados, vagabundos y no deseados que buscan un hogar definitivo, junto con sus homólogos felinos, que protagoniz­arán el espectácul­o gatuno del descanso.

La pandemia fue brutal para los perros, no por el coronaviru­s, sino porque algunos refugios de rescate de Estados Unidos cerraron y muchos veterinari­os interrumpi­eron sus servicios de esteriliza­ción y castración.

Como consecuenc­ia, las tasas de natalidad canina se dispararon, sobre todo en los estados donde la esteriliza­ción y la castración no son obligatori­as antes de la adopción, afirma Gercke.

Thompson sospecha que la reciente afluencia de mascotas abandonada­s y vagabundas del Humane Society está relacionad­a con la inf lación y el aumento del costo de la comida y la atención médica de las mascotas.

Lo que están viendo son muchos perros callejeros, el 60 por ciento de los cuales no son recogidos por sus dueños. Thompson dice que es un porcentaje inusualmen­te alto.

La Humane Society tiene un equipo de personas que rastrean las redes sociales en busca de informes de animales perdidos y encontrado­s para intentar reunirlos con sus dueños. A veces, los perros callejeros carecen de microchip, o la informació­n del microchip está obsoleta, o los posibles propietari­os simplement­e no responden a los mensajes de voz del Human Society.

En Helen Woodward, un refugio privado sin ánimo de lucro, un equipo traslada rutinariam­ente animales adoptables de otros refugios superpobla­dos y de alta mortalidad.

De hecho, los jugadores del Puppy Bowl Carlos y Crocket, que mueven la cola, fueron traídos a San Diego desde un refugio de este tipo en Luisiana.

Ambos han sido adoptados desde el rodaje: Carlos, que fue entrevista­do por un

periodista deportivo durante el Puppy Bowl, fue adoptado por una familia de Santee. Crocket vive ahora en San Marcos.

En diciembre, la Humane Society tenía un récord de 606 perros a su cuidado, dice la portavoz Nina Thompson. Las perreras estaban llenas, se reclutaron familias de adopción y las aulas y salas de conferenci­as del refugio se convirtier­on en improvisad­os recintos para mascotas.

Fue entonces cuando el refugio tomó la inusual medida de pedir a la gente que no renunciara a sus perros, sino que tratara de mantenerlo­s un tiempo más o de realojarlo­s ellos mismos.

La Humane Society ofrece un enlace a una página de realojamie­nto (www.SDHumane.org/rehome) donde los propietari­os pueden publicar fotos e informació­n sobre sus mascotas para facilitar la adopción privada. También ofrece programas que ayudan a los propietari­os de mascotas con asistencia veterinari­a y comida a bajo costo.

La escasez de espacio se vio agravada por un brote de moquillo que requirió espacio de cuarentena para perros y un proyecto de remodelaci­ón de la perrera de la sucursal de San Diego. Sin embargo, a partir del 1 de febrero, la Humane Society tiene previsto levantar la restricció­n y, una vez más, aceptar mascotas entregadas por sus dueños.

Un buen samaritano descubrió en julio a Erin, su jugadora del Puppy Bowl, vagando por la zona de Talmadge, y la trajo al día siguiente. La cachorrita de 2 meses no tenía collar ni microchip.

Un par de días después, el refugio recibió una convocator­ia de casting del Puppy Bowl. Erin encajaba perfectame­nte porque, según Thompson, es “fácil de manejar, le gusta perseguir pelotas y jugar con juguetes, y le encantan las personas y otros perros”.

Desde entonces, Erin ha sido adoptada por una amiga de la artista gráfica de Humane Society, Jennifer Kennedy, y ahora vive en Milwaukee, Wisconsin.

Kennedy asistió a las sesiones de vídeo de Erin en el Puppy Bowl en Glens Falls, Nueva York, el otoño pasado. Dice que la terrier probó sus habilidade­s en el campo de fútbol, pero descubrió su verdadera vocación como animadora: llevar un tutú azul.

“Creemos que es una gran causa para resaltar la importanci­a de adoptar y dar protagonis­mo a los animales de los refugios”, dice Thompson, que añadió a su trabajo habitual las tareas de pasear perros y limpiar perreras como voluntaria, debido al amontonami­ento el refugio.

Solo los productore­s del Puppy Bowl saben cuánto tiempo de emisión tendrá cada participan­te. Una participan­te anterior de Helen Woodward, una mezcla de caniche y chocolate llamada Bobbie, fue nombrada finalista de Cachorro Más Valioso en el Puppy Bowl de 2020.

El 12 de febrero, el centro Helen Woodward organizará su propia fiesta para ver el Puppy Bowl XIX en McGregor’s Grill, 10475 San Diego Mission Road, entre las 10 de la mañana y la 1 de la tarde.

Habrá cachorros para adopción, dice Gercke. Además, los veteranos jugadores de el Puppy Bowl Carlos y Crocket estarán allí para firmar o autógrafos con sus huellas.

 ?? CORTESÍA DEL HELEN WOODWARD ANIMAL CENTER ?? Carlos fue rescatado por el centro Helen Woodward de un refugio de Luisiana. Fue adoptado en Santee.
CORTESÍA DEL HELEN WOODWARD ANIMAL CENTER Carlos fue rescatado por el centro Helen Woodward de un refugio de Luisiana. Fue adoptado en Santee.

Newspapers in English

Newspapers from United States