Cómo actuar cuando la vida como la conoces cambia de repente
Aunque desde nuestro proceso cognitivo ‘sabemos’ que los cambios, además de ser inevitables, son una constante en nuestras vidas; seguimos enfrentándonos a ellos junto con sus nuevos comienzos, envueltos en una mezcla de emociones entre las que se encuentran el enojo, la tristeza y el miedo. En esta ocasión, quisiera centrarme en el miedo, esa poderosa emoción que a veces nos paraliza o nos provoca huir, y que además esconde secretos sobre la forma de operar de nuestro cerebro.
El cerebro y el miedo
El cerebro es un órgano, obra maestra de la naturaleza, cuya principal función es nuestra supervivencia. En su complejidad, encontramos regiones que han evolucionado a lo largo de millones de años. Entre ellas, el cerebro reptiliano y el sistema límbico, estructuras que, aunque primitivas en su origen, influyen en cómo percibimos y respondemos a los cambios.
Es normal sentir miedo ante lo desconocido, después de todo, nuestro cerebro nos protege. Pero ¿qué pasa cuando el miedo se convierte en una reacción desproporcionada frente a situaciones que no son amenazantes para nuestra supervivencia? Es aquí donde el autodescubrimiento y el conocimiento sobre nuestro cerebro adquieren un valor importante.
El poder de volvernos conscientes: Las interpretaciones que hacemos sobre el significado de la vida y lo que nos rodea dan lugar a nuestro sistema de creencias, algunas de ellas contribuyen a nuestro crecimiento y algunas otras nos limitan. Cuando logramos ser conscientes de esto, nos damos cuenta de que nuestras emociones, en realidad, son nuestro sistema de mensajería interno que responde a nuestros instintos primarios de supervivencia.
De acuerdo con Daniel Kahneman en su libro Thinking, Fast and Slow, nuestro cerebro opera en dos sistemas de pensamiento distintos.
Sistema 1. El Pensamiento Rápido: es automático, intuitivo y emocional. Ideal para decisiones rápidas y respuestas emocionales, por lo que puede llevarnos a cometer errores porque no permite una visión con amplia perspectiva.
Sistema 2. El Pensamiento Lento: es deliberado, analítico y consciente, útil para resolver problemas y tomar decisiones informadas. Ambos sistemas influyen en nuestra naturaleza humana y en cómo enfrentamos el mundo. Al conocer esta dualidad, podemos aprender a tomar decisiones alineadas con lo que es mejor para nosotros.
La clave está en aprender a generar espacio entre las circunstancias y nuestras reacciones. Cuando reconocemos que nuestro sistema de mensajería nos ayuda a
observar las inercias que hacen que percibamos los cambios como amenaza, nos volvemos cada vez más conscientes de que se trata de una respuesta instintiva de nuestro cerebro para protegernos. Este estado de conciencia nos lleva a entender que sentir miedo es humano, y al mismo tiempo, que tenemos la capacidad de ser dueños de nuestras decisiones y respuestas ante nuevos escenarios.
Si nos damos tiempo para observar nuestras reacciones antes de responder, podemos tomar decisiones con claridad, en lugar de actuar impulsivamente debido a una reacción de supervivencia. De esta manera, le damos la bienvenida a nuevos comienzos sin la necesidad de aferrarnos a lo
conocido.
En Be2Be-Coaching, nuestra entrega y compromiso están orientados a acompañarte a construir un puente entre tu desarrollo personal y los roles que desempeñas, a través del autodescubrimiento. Nuestra metodología se basa en la reprogramación del software humano, enfocándonos en la autosuficiencia emocional; equipando a las personas para asumir la responsabilidad de las consecuencias y el impacto que generan sus decisiones, tanto conscientes como subconscientes.
Como buenas prácticas, hemos integrado una herramienta desarrollada por Naturaleza Humana, como punto de partida en el camino hacia el autodescubrimiento, que nos permite descubrir la configuración de nuestra personalidad subconsciente, lo que contribuye al desarrollo de este espacio entre las circunstancias y nuestras reacciones. Esto, nos permite enfrentar cambios y nuevos comienzos con una visión distinta, lo que gradualmente nos ayuda a recuperar la confianza en nosotros mismos y también a comprender que el miedo es una emoción natural y que la mayoría de los cambios que nos generan miedo, son oportunidades para crecer y mejorar.
La vida es una constante transformación, y el conocimiento sobre nuestro cerebro y nuestras emociones nos permite afrontar los cambios con sabiduría. Podemos aprender a ser conscientes de nuestras reacciones, a abrazar el miedo como un mensaje en lugar de un obstáculo, lo que contribuye a que tomemos decisiones desde la claridad que nos brinda un estado de conciencia más elevado.
Si te interesa este tema y quieres descubrir la relación entre el cambio y las otras dos emociones que mencionamos, el enojo y la tristeza; o si quieres descubrir el color preliminar de la configuración de tu personalidad subconsciente, escríbenos a info@be2becoaching.com con el asunto: cambios/agosto2023
Hasta la próxima.