Contra la escasez del talento digital
Tres amigas crearon una plataforma que utiliza una metodología de aprendizaje innovadora con el objetivo de cubrir los puestos de trabajo de IT que demandan las empresas. La historia de Mindhub.
EEl sector de Tecnología de la Información (IT) crece a pasos agigantados y los recursos humanos con formación sólida son insuficientes para cubrir la demanda laboral. Según la Cámara Argentina de la Industria del Software (CESSI), cada año se crean entre 12.000 y 14.000 nuevos puestos a nivel local, pero apenas se cubren 7.000.
Frente a este contexto, tres amigas –Patricia Martucci, Alejandra Ripa y Vanessa Taiah– crearon Mindhub. Este emprendimiento nació en 2018 con el objetivo de formar a la próxima generación de creadores tecnológicos en los perfiles más demandados del mercado. Lo interesante es que lo hace a través de los bootcamps, una metodología de aprendizaje intensiva.
Y la respuesta del mercado fue excelente: luego de dos años de crecimiento en el mercado argentino, en marzo de 2020 esta compañía abrió oficinas en Santiago de Chile y decidió exportar sus bootcamps a otros países de la región como Uruguay, Paraguay, Perú, Colombia y, en breve, desembarcará en Brasil.
Las emprendedoras se conocieron hace 25 años en Accenture, empresa multinacional que brinda servicios tecnológicos. Allí tuvieron largas trayectorias que las convirtieron en profesionales regionales en el ámbito tecnológico, donde solo el 16% de los puestos laborales eran desempeñados por mujeres. Juntas crearon Mindhub, un espacio que busca favorecer la inclusión y disminuir la brecha no solo de género, sino también la que existe entre la demanda de talento digital en el mercado y la oferta real.
La idea surgió en la cocina de la casa de Taiah, mientras conversaban y hablaban de los problemas que enfrentaban laboralmente. “Veníamos de experimentar la decepción de no conseguir el talento en nuestro lugar de trabajo y sentimos la necesidad de emprender sobre este camino. Si bien el mundo del emprendedor era nuevo y un gran desafío, teníamos en claro cuál era nuestro objetivo y hacia dónde queríamos ir, y con eso nos alcanzaba”, recuerda Taiah.
Debido a su posición en Accenture, estas tres profesionales pudieron identificar la escasez de talento digital en distintos países de Latinoamérica. Cuando se retiraron del mundo corporativo, en 2018, crearon este emprendimiento educativo tecnológico con foco en la empleabilidad. “Así nació Mindhub, con la misión de convertirse en eslabón clave en la generación de empleo digital y como respuesta ante un problema clásico en el rubro de la tecnología: la escasez de talento digital bien formado, tanto en habilidades blandas como técnicas”, agrega.
Esta empresa, que demandó una inversión inicial de $ 3,5 millones, ya cuenta con más de 1.000 alumnos egresados, un índice de empleabilidad del 87% y US$ 390.000 de ventas entre enero y abril de 2021. “No nos dimos cuenta del impacto que provocábamos en los chicos hasta que comenzamos a ver con nuestros propios ojos los resultados de este gran proyecto”, resalta la emprendedora.
INNOVACIÓN
Cuando se les pregunta a las fundadoras el secreto, coinciden en que la clave es su metodología de aprendizaje: los bootcamps. Pero ¿de qué se trata? Son programas intensivos e innovadores en los que se simula un entorno real de trabajo, uniendo educación y empleabilidad. De esta manera, se forman talentos digitales listos para insertarse en el mercado. “Los alumnos adquieren el conocimiento desde el hacer, siempre guiados por profesionales que los acompañan en cada proyecto”, explica Taiah.
Esta metodología la utilizan en dos segmentos: en empresas y alumnos. En este último caso, los bootcamps simulan un ámbito laboral liderado por un mentor, que juega el rol de líder de equipo o Project Manager, y por un supervisor con una mirada 360° sobre los alumnos y mentores. A través de las plataformas se proponen proyectos. Los alumnos no necesitan tener conocimientos técnicos previos y, cuando finalizan, pueden desempeñarse como desarrolladores de software, analistas de datos o profesionales en las habilidades que adquieran. Los programas pueden durar de 600 o de 800 horas, según la capacitación elegida.
“La promesa de Mindhub es crear talento digital capacitado de tal forma que pueda pasar directamente del entorno académico al laboral, reduciendo los tiempos de transición debido al ambiente simulado previamente. Cuando un alumno egresa de nuestra empresa lo hace con un portfolio de proyectos”, señala Taiah.
Aunque para la admisión al bootcamp no es necesario tener conocimientos técnicos previos, se evalúa la adaptabilidad de los alumnos al método de aprendizaje implementado, que es completamente diferente al utilizado en la escuela y en la universidad.
“Por otro lado, nuestros bootcamps para empresas respetan la misma metodología, aunque a veces se requiere de ciertos conocimientos previos. Depende del perfil de cada compañía, pero la duración de los programas en general promedia las 160 horas”, aclara la socia fundadora.
MODELO DE NEGOCIO
“Nuestras capacitaciones están dirigidas a los alumnos que quieran sumar habilidades digitales a fin de conseguir un primer empleo de calidad en empresas o startups de primer nivel, mejorar el que tienen o desarrollar su propio emprendimiento. Para ellos, estamos implementando un formato de pago diferido, que permite pagar el bootcamp una vez empleado con un porcentaje de su sueldo. Esto permite acortar la brecha social tan grande que existe hoy en nuestra región”, sostiene la fundadora. Justamente, el 50% de las ventas de Mindhub provienen de esta opción, donde los alumnos pagan por su capacitación y el trabajo termina cuando se insertan laboralmente.
El otro 50% proviene de empresas u organismos, que pueden recurrir a Mindhub tanto si necesitan sumar un talento nuevo como reconvertir uno que tienen. En este caso, la empresa de capacitación les arma programas exclusivos para generar habilidades puntuales en tecnología como data analytics, desarrollo web y Salesforce, entre otras herramientas. “En este esquema somos parte del proceso de recruiting o de entrenamiento donde las compañías pagan por sus cohorts –asegura Taiah–. Después de estos años todavía nos emocionamos cada vez que un egresado de Mindhub consigue trabajo o vuelve a contarnos cómo logró cambiar su vida”, concluye.