EL TURISMO SE DA EL LOTE
Además de la gran Feria del Turismo, FITUR es también la fiesta de la Gastronomía. Pues con pan y vino se anda mejor el camino.
La Feria del Turismo, Fitur, mostró que con pan y vino se anda mejor el camino.
¿Cuántas veces habremos oído que España ha batido su récord de visitantes extranjeros o que el turismo es el gran motor de nuestra economía? El reciente informe de la Consultora KPMG, “La gastronomía en la economía española”, lo confirma: aportar un análisis económico de la gastronomía a través de un conjunto de actividades asociadas que integran una cadena de valor, que arranca en la producción agrícola, alcanza la distribución, llega a la hostelería y culmina con el turismo culinario. Todo ello no impide que también se hable mucho de las graves consecuencias medioambientales del urbanismo y del hastío ciudadano ante la masificación o el poco valor añadido del sol y playa. El turismo gastronómico aporta soluciones para todo eso y vuelve a estar muy presente en Fitur, la »
Feria Internacional del Turismo, que acaba de cerrar sus puertas en Madrid.
Coincidiendo con esta cita ya clásica, se hicieron públicos los datos oficiales de Turismo. España cerró 2018 con un nuevo récord de 82,6 millones de turistas internacionales, cifra que supone un incremento del 0,9 % respecto al año anterior, que fue un record absoluto. La cifra es destacable porque se temía que la relativa recuperación de destinos competitivos como Túnez, Egipto o Turquía y los bajos precios que han ofrecido, así como el buen tiempo durante buena parte del año en casi toda Europa, pudiera dañar la llegada de turistas a España. No ha sido así y, otro dato destacado, es la mejora en la calidad de los turistas, ya que el gasto se ha situado en torno a los 90.000 millones de euros, un 3,1% más que en 2017.
Por otra parte, según los datos que presentó la OMT en los días previos a FITUR, 2018 se cerró con el récord de 1.400 millones de llegadas internacionales en el mundo, un 6% más, lo que supone adelantar en dos años el pronóstico a largo plazo que había publicado la propia organización en 2010, y para este 2019 la previsión sitúa el crecimiento entre un 3 y un 4%.
ALMERÍA, CAPITAL GASTRONÓMICA
Las siglas de Capital Española de la Gastronomía son hoy un referente, incluso internacional, de una idea brillante, una marca de prestigio y una garantía de que la ciudad que la ostenta cada año se convierte en uno de los principales destinos gastronómicos y turísticos. El acto de traspaso de la capitalidad de León a Almería ha sido, un año más, la principal convocatoria mediática.
El alcalde de Almería, Ramón Fernández-Pacheco, recibió de manos del alcalde de León, Antonio Silván, el símbolo de la Capital Española de la Gastronomía, arrancando así los eventos del año 2019 con una agenda repleta de acontecimientos gastronómicos que ”han de suponer la rampa de lanzamiento de Almería como destino turístico y gastronómico”, en palabras de Mariano Palacín, presidente de Capital Española de la Gastronomía (CEG).
Fernández-Pacheco agradeció a su homólogo su implicación en la candidatura de Almería, que ha ayudado a establecer lazos institucionales entre las dos ciudades. “Hemos basado nuestra candidatura con un doble objetivo: el de enseñar todo lo bueno que tiene nuestra ciudad, pero también, con el objetivo de aprender de aquellos que nos han precedido, y por eso quiero dar las gracias a los representantes de las ciudades que antes que Almería han sido capitales”, dijo el alcalde de Almería.
En el acto estuvo presente el presidente de Hostelería de España, José Luis Yzuel, quien señaló que “la gastronomía es un elemento que nos une a todos”, y añadió que “somos los que decidimos a qué sabe España” y eso lo deciden los españoles “en nuestras barras”. Hoy hay que “dar las gracias a los alcaldes” por apostar por los proyectos que resaltan la gastronomía que está ligada con la cultura. “Felicitar a Almería por este año que va a apostar por esta línea de visualización del producto agroalimentario del turismo gastronómico y felicitar también a León por esa grandísima candidatura y capital”, concluyó.
Pero no todos los destinos están tan consolidados. El alcalde de Almería, Ramón Fernández Pacheco, se ha propuesto que el mundo descubra la riqueza de la huerta, del Mediterráneo o de las tapas almerienses y, para conseguirlo, aspira a convertir la ciudad andaluza en la Capital Española de la Gastronomía 2019. Un objetivo que serviriía para alargar el verano de mayo a octubre.
Pero FITUR es, además de la gran feria del turismo, también de la gastronomía, porque ambos conceptos van siempre unidos. Ganas de comer es lo que parece haber entre muchos de los visitantes de esta convocatoria tradicional y la oferta no defrauda, tal vez contagiada por su vecina Madrid Fusión. Cualquier stand que ofreciera una mínima loncha de jamón, un trozo de queso, un minúsculo plato de arroz, un café, un bombón o una pequeña anchoa provocaba colas de decenas de personas que permanecían hasta media »
hora para conseguir su objetivo.
Una de las presentaciones más atractivas fue la que hizo Navarra bajo el título “Catar paisajes” en su propio stand, en la que presentaron seis originales tapas, cada una con su vino. Los asistentes, contagiados por el entusiasmo de manjares y vinos, terminamos cantando... en euskera. Pero hubo mucho más, incluso durante el fin de semana abierto al público: quesos de Los Cameros en La Rioja; la Tarta de Palodulce, presentada por La Huella Vegana de Rivas Vaciamadrid a base de hinojo, calabaza y palodulce, ideal para veganos; degustaciones del restaurante La Bastilla, con el lema “Aragón con gusto”; jamón ibérico de bellota con la Denominación de Origen ‘Dehesa de Extremadura’ y también en el stand de Guijuelo; degustación de bacalao islandés, cerveza y chocolate de Flandes; talleres de elaboración de platos con frutas tropicales de la Costa Tropical; tortas de arroz crujientes dulces de Tailandia o degustación de rones y dulces típicos de Nicaragua...
Como novedad, Cataluña apuesta en Fitur por su red de hoteles gastronómicos: establecimientos pequeños y medianos que ofrecen la posibilidad de conocer los productos de la zona a través del recetario tradicional. Pero tampoco faltarán citas gastronómicas repartidas por todas las hojas del calendario: las jornadas Benvinguts a Pagès, la Ruta del Vermut de Reus, el Barcelona Beer Festival...
En las Islas Baleares sucede algo parecido porque disponen de un gran patrimonio gastronómico, pero la gran mayoría de los turistas sigue yendo en busca de sol y playa. “Es importante informarles de que pueden disfrutar de otras cosas”, señala Margarita Amat, presidenta del Club de Producto Gastronomía de Mallorca.“La oferta es abundante, variada y de muy alta calidad. Incluye restaurantes de alta cocina, propuestas relacionadas con el oleoturismo, el enoturismo, los productos agrícolas o la repostería y también eventos como Nit del Vi, Festa des Vermar, Wine Days Mallorca, Peccata Minuta, Festa del Callet... Pero Mallorca aún no ocupa un lugar relevante entre los destinos elegidos para hacer turismo gastronómico”.
Asturias es otro de los destinos que
más apuestan por el turismo gastronómico. De hecho, según el II Estudio de la demanda de turismo gastronómico en España realizado por la consultora Dinamiza, obtuvo una puntuación de 3,71 sobre 4. María Durán, de Turismo de Asturias, señala que el gasto del turista gastronómico es superior a la media (486 euros frente a 454). También se informa más a través de las redes sociales (18,2 % frente al 6,9) y, después de comer fabada o platos con estrella Michelin, de adentrarse en las cuevas donde madura el Cabrales y de tomarse alguna que otra sidra, suele marcharse gastronómicamente muy satisfecho, con una puntuación de 9 sobre 10. La alcaldesa de Marbella, Ángeles Muñoz, presentaba la IV Cumbre de Marbella All Stars, donde los protagonistas son la exclusividad, la gastronomía, la costa y los eventos, o la Fiesta Pop a la que asistí, ¿te acuerdas?
El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación sorprendía con la presentación de la FDM (Fundación de la Dieta Mediterránea), el término Denominación de Origen y se abrió debate sobre origen, producto y turismo.