Soy de las que se dejan llevar, vivo el DÍA A DÍA
A sus 25 años recién cumplidos, Laura asegura que no hay una edad perfecta para nada. Su filosofía es concentrarse en el presente, con la convicción de que a veces hay que parar y decir “vamos a disfrutarnos”.
HaceHace poco más de un año, Laura Escanes fue portada de CLARA y pocas semanas después nos confinaban debido a la pandemia. Ha sido un año muy extraño para todos, en el que Laura ha estado muy volcada con su pequeña Roma y con nuevos proyectos.
Laura, ¡qué giros da la vida en tan poco tiempo! ¿Cómo lo has vivido tú?
¿Quién nos lo iba a decir? Por una parte parece que fue ayer, y por otra es como si hubiera pasado una eternidad. Cuando pienso que viajábamos, nos abrazábamos o salíamos de fiesta, la verdad es que siento una nostalgia… La pandemia empieza ya a pesar.
Hemos tenido que cambiar de hábitos a la fuerza...
La verdad es que al principio, cuando estábamos todos confinados, agradecí esos momentos para pasar más tiempo con Roma. Al no poder hacer trabajos presenciales, me vino muy bien para conocernos mejor y adaptarme a sus rutinas de bebé. Después, a partir de septiembre, tras las vacaciones, se me hizo muy cuesta arriba. Pero ahora ya estoy más positiva, porque veo que están vacunando a la gente... Eso y que vuelve a hacer buen tiempo, lo que hace que vea las cosas con más optimismo, ja, ja, ja.
Hace poco has cumplido 25 años. ¿Eres de las que hacen balance cuando llega una fecha “redonda”?
No, no soy de las que dicen “tengo 25 años y a partir de ahora tengo que hacer esto o aquello”. Creo que no hay una edad perfecta para nada. Prefiero no hacer balance ni ponerme metas, no vaya a ser que luego me arrepienta. Vivo el presente.
Cuarto aniversario de tu boda con Risto, ¿tampoco piensas en cómo han sido estos años?
En el aspecto del amor es súper bonito recordar los comienzos, los buenos momentos, pero también los malos, porque son los que te hacen más fuerte como pareja. Como balance, el estar casados creo que
no nos ha cambiado mucho la vida. El cambio más grande ha sido ser padres. Y ha sido maravilloso. No lo cambio por nada del mundo.
Supongo que ahí, en esos momentos de intimidad, no reconoceríamos al Risto que vemos en televisión...
Es normal. De cara al público o cuando colgamos algo en redes, mostramos solo una parte de nosotros. En casa siempre eres distinto. Tampoco es cuestión de que todo el mundo sepa todo de ti. Está bien conservar algo de misterio.
Pero la gente siempre quiere saber más. Por ejemplo, tuviste que desmentir tu embarazo.
Así es. A corto plazo no hay nada previsto. Sí que me encantaría que Roma tuviera un hermanito o hermanita, pero como te decía antes, no me gusta hacer planes, soy muy de dejarme llevar. Cuanto más planificas algo, luego te sale todo al revés.
Hablando de Roma, hace poco comentabas que te daba pena que creciera tan rápido...
Me encanta esta etapa porque está muy divertida, ya dice sus primeras palabras, tiene sus propios gustos, te ríes mucho con ella… Pero pasa el tiempo tan rápido que me gustaría gustaría pararlo y aprovecharlo todo al 200%. Y más en nuestro caso, con semanas locas a caballo entre Madrid y Barcelona. A veces necesitas parar y decir “vamos a disfrutarnos”. Cuando tienes el peor día del mundo, escuchas a Roma reír y se te pasa todo. Es la mejor medicina.
Tienes más de millón y medio de seguidores en las redes y te encanta interactuar con ellos...
Sí, es verdad, tiempo atrás estaba algo más distante y ahora me da un poco igual todo, comparto más cosas en redes. Y si me tienen que criticar, que me critiquen.
¿No te afectan entonces los comentarios de los haters?
He pasado por momentos difíciles, no te voy a engañar. Pensamos que podemos con todo y no es así, nos acaban afectando las cosas. Pero está bien mostrar nuestras debilidades y que los seguidores nos vean de tú a tú. Si tengo que salir en pijama, salgo y no pasa nada, soy muy natural. Pero, por supuesto, me guardo muchas cosas para mí.
“Cuando tienes el peor día del mundo, escuchas reír a Roma y se te pasa todo. Es la mejor medicina”.
Laura, hace tres años que publicaste Piel de letra. ¿Para cuándo un nuevo libro?
Es algo que he ido aplazando, por el confinamiento, porque han surgido otros proyectos... De todas maneras, hay que encontrar el momento. No comparto lo de tener que escribir un libro para una fecha concreta. Un libro puede ser muy sanador y lo escribes cuando lo sientes.
Has hablado de proyectos, ¿nos puedes avanzar algo?
Pues estoy inmersa en algo nuevo que me encanta, pero no lo puedo desvelar. Verá la luz dentro de muy poco y será en Madrid.
¿Relacionado con la moda?
No, está relacionado con la belleza y llevamos trabajando en él muchos meses. No está vinculado con ninguna firma en concreto, es un proyecto personal... y ya no puedo decir nada más.
Pues ya que hablamos de belleza, ¿haces dieta o ejercicio?
Llevo mucho tiempo entrenando con Crys Dyaz, antes online y ahora quedamos para hacer ejercicio juntas. Me siento muy bien, estoy súper activa y como muy sano. Eso sí, me permito algún que otro capricho: capricho: helado, pizza, chocolate... porque hay que disfrutar de la vida. Después se compensa con algo de ejercicio y ya está.
Te encanta jugar con tu imagen, ¿algún color nuevo de pelo rondando por tu cabeza?
Cada equis tiempo me apetece cambiar, si no me aburro. Me encantaría decolorármelo y llevarlo platino otra vez... o mechitas, cualquier cosa que me aporte luz. No me veo con el pelo oscuro.
¿Y alguna rutina especial de belleza que siempre sigas?
Apenas me maquillo, pero odio irme a la cama sin limpiarme bien la piel. Aunque me quede dormida mirando el móvil y sean las 2 de la madrugada, me levanto y me limpio la cara. También me encanta ponerme una mascarilla facial o capilar una vez a la semana. Todas deberíamos buscar un día de automimos.