FRAMBUESAS SIN LÍMITES
La frambuesa suma cualidades saludables al aroma, el sabor y el color únicos de esta baya.
Bien podríamos decir que la frambuesa es un caramelo delicioso que nos regala la naturaleza. Podemos encontrarla entre senderos en cualquier lugar remoto. Su característico sabor, entre dulce y un poco agrio, convierten a la frambuesa en un delicado y sabroso néctar.
CONTROLAN EL AZÚCAR Carga glucémica: como el resto de frutos rojos, la frambuesa se caracteriza por tener una carga glucémica muy baja (1,2), por lo que evita las subidas rápidas de azúcar y ayuda en el tratamiento de la diabetes. Además posee un compuesto denominado tilirosida que inhibe la descomposición de los carbohidratos en azúcares. Vitaminas C y E: contiene grandes cantidades de estas dos vitaminas antioxidantes. Una ración de 100 g aporta el 42% de la vitamina C que se precisa al día y el 38% de la vitamina E. Antocianinas: le confieren el color e incrementa sus propiedades antioxidantes al reforzar el efecto de las vitaminas antioxidantes. La frambuesa de cultivo ecológico contiene más antocianinas y otros flavonoides.
Minerales: aporta cantidades significativas de manganeso (hasta un 34% del aporte mínimo recomendado al día), hierro, magnesio, fósforo, calcio y potasio. Es baja en sodio.
Desintoxica: por su contenido en potasio y en ácidos orgánicos que estimulan el hígado posee propiedades depurativas. Previene el envejecimiento prematuro y numerosas enfermedades degenerativas.
Antianémica: la combinación de vitamina C y hierro la convierten en alimento adecuado para las personas con tendencia a sufrir anemia.
Colesterol controlado: es rica en fibra, que facilita el buen tránsito intestinal y la eliminación del exceso de colesterol. ¡El corazón va a estar lo más contento si comes frambuesas!
Peso: contiene un fitonutriente denominado reosmina que aumenta la actividad enzimática y el metabolismo de las grasas, lo que reduce su acumulación como reserva energética.