COMBATE LA HINCHAZÓN
La joven reina Claudia de Francia (1499-1524) se entusiasmó con esta fruta exquisitamente dulce. Su piel verdosa se dora al madurar y se cubre de una capa cérea que retiene el agua frente al calor del verano, lo que la vuelve muy jugosa además de dulce.
Es muy rica en potasio, mineral que contrarresta el sodio y evita la retención de líquidos, tan frecuente en verano. Esto, junto a su efecto laxante por la presencia de fibra y sorbitol, las hace muy depurativas. Además aportan vitaminas B1, C y E.
Es la ciruela de mesa por excelencia, aunque también se puede utilizar para desecar o elaborar mermelada y disfrutar de su aroma en otoño e invierno.