PRINCIPALES SEÑALES DE ALARMA
Sed intensa. El cuerpo nos avisa de que le faltan líquidos. Hay que beber cuanto antes.
Sudoración alterada. El cuerpo es incapaz de sudar lo suficiente y se eleva la temperatura corporal. En una primera fase hay sudor intenso, y luego escaso, una señal de que la regulación ya no funciona.
Piel enrojecida y seca. Avisa de una ausencia de transpiración.
Dolor de cabeza. Es uno de los primeros síntomas. Se puede sentir un latido en la cabeza.
Agitación respiratoria. Respiración y frecuencia cardiaca muy rápidas.
Calambres. A menudo es el primer síntoma. Son espasmos musculares que delatan un trastorno electrolítico. La sudoración abundante ocasiona una pérdida de minerales, sobre todo de sal, y también potasio, calcio, magnesio…
Alteracion mental. Especialmente delirio y confusión, aunque también convulsiones y agitación.
Desfallecimiento. Desmayo de energía: faltan las fuerzas, la piel está muy roja y la tensión, muy baja. El dolor de cabeza y los calambres se intensifican notablemente. Advierte de un riesgo inminente, por lo que debemos desplazarnos a un hospital cuanto antes.