Diez Claves VIVIR CADA MOMENTO TRANSFORMA TU VIDA
1 No aplaces los buenos momentos. Como el cazador del cuento que encuentra abiertas las puertas de Shambhala, cada oportunidad se nos ofrece solo una vez. Si no Ia abrazas, se pierde para siempre. La vida es un asunto de ahora o nunca.
2 Vive como si esto fuera a ocurrir una sola vez en tu vida. El consejo del maestro de té de hace medio milenio sigue vigente. Por eso, es inspirador saludar a nuestros seres queridos y despedirnos de ellos con un ichigo-ichie para tomar conciencia de lo único e irrepetible de este encuentro.
3 Instálate en el ahora. Los viajes al pasado y al futuro son la mayoría de las veces dolorosos y, casi siempre, inútiles. No puedes cambiar lo que ya pasó. No puedes saber lo que pasará. Pero aquí, en este momento, Iaten para ti todas las posibilidades del mundo.
4 Haz algo que nunca hayas hecho. Como decía Albert Einstein, no se pueden esperar resultados diferentes actuando siempre del mismo modo. Otra forma de lograr un momento inolvidable es entregarte al kaika, permitir que florezca en ti algo nuevo. En lugar de compararte con los demás, de preocuparte por lo que piensan los otros, asume que eres un ser único en el mundo.
5 Practica el zazen. Puedes acomodarte en un cojín de meditación o, simplemente, sentarte a observar el milagro de Ia vida. El solo hecho de bajarte del torbellino cotidiano de obligaciones y prisas abrirá las compuertas del bienestar. Hacer pronósticos, esperar que sucedan determinadas cosas, es una manera segura de matar el momento. El ichigo-ichie se vive con la mente no condicionada que enseña el zen.
6 Aplica el mindfulness a tus cinco sentidos. Entrena el arte de escuchar, de mirar, tocar, saborear y oler para darle a cada momento que vivas toda Ia riqueza de las percepciones humanas. Es algo que te permitirá también estar más atento a los demás y que aumentará tu empatía e influencia.
7 Detecta las coincidencias. Ser consciente de las sincronicidades nos ayuda a leer mejor las señales que nos manda el destino. Un diario en el que tomemos nota de estos momentos de magia cotidiana aumentará nuestra capacidad de seguir los hilos invisibles de la realidad.
8 Convierte cada encuentro en una fiesta. No esperes a que se den determinadas condiciones –vacaciones, un viaje, un cumpleaños– para vivir lo extraordinario. Con Ia disposición adecuada, cada día puede ser domingo.
9 Si no te gusta lo que hay, crea algo diferente. El ser humano es transformador por naturaleza, y tiene el poder de reinventarse todas las veces que sea necesario. Si tu realidad es demasiado aburrida y previsible para vivir con ichigo-ichie, tienes la oportunidad de crearte otra. 10
Sé un cazador de buenos momentos. Solo puedes vivir un día a la vez, y además nadie puede estar seguro de amanecer al día siguiente. Por lo tanto, no aplacemos la felicidad. El mejor momento de tu vida es siempre este que estás viviendo. Y como sucede con cualquier oficio, cuanto más practiques, más abundantes y generosas serán las recompensas.
ENTRENA el arte DE ESCUCHAR, MIRAR Y TOCAR