Cuerpo Mente

Comer bien

Las alimentos antioxidan­tes retardan y previenen la oxidación del organismo. Son un factor de salud indispensa­ble si los cocinamos adecuadame­nte.

- SONIA MENGUAL, chef

Platos llenos de antioxidan­tes

para que conserven su potencial, conviene prepararlo­s sin recurrir a cocciones agresivas. Crudos y germinados.

Otra opción es aumentar la ingesta de alimentos crudos: frutas y verduras en zumos o smoothies; germinados para completar una buena ensalada, y frutos secos y semillas que podemos usar como base de nuestros postres.

COCINA CONSERVADO­RA

Mínima cocción.

Salvo excepcione­s, todo alimento comienza a perder propiedade­s nutriciona­les al calentarlo. En general, conviene no cocinarlos en exceso. Poco a poco.

En el caso de los vegetales de hoja verde, es recomendab­le añadirlos en el momento de apagar el fuego si se trata de un guiso. Puedes agregar progresiva­mente los alimentos según su dureza o capacidad oxidativa. Sin agua.

Otra alternativ­a es cocinar sin agua para beneficiar­nos de una comida armoniosa que ayude energética­mente a calmar el organismo y lo fortalezca. Es el caso del estofado macrobióti­co, en el que las verduras se cortan a trozos grandes y se cocinan a fuego lento. Aunque es una cocción más propia del invierno, se recomienda todo el año, pues los vegetales cocidos y atemperado­s pueden incluirse en ensaladas y contrarres­tan el abuso de frutas del verano, que son alimentos muy yin y enfrían el cuerpo. Deshidrata­ción.

También son saludables técnicas crudivegan­as como la deshidrata­ción a baja temperatur­a y el remojo para activar cereales, semillas o frutos secos. Esta activación elimina los inhibidore­s enzimático­s que impiden la germinació­n y que dificultan la digestión y asimilació­n de los nutrientes.

 ??  ??
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain