«SE PUEDEN DISEÑAR LOS COLEGIOS COMO REFUGIOS VERDES»
—¿Se pueden lograr los mismos beneficios en un bosque que en un jardín urbano? —Incluso esos pequeños espacios verdes urbanos pueden generar beneficios para la salud. Es difícil compararlos, ya que los contextos son muy diferentes. Lo importante de la naturale- za urbana es que puede brin- dar beneficios a los residentes de las ciudades que, de lo con- trario, no estarían muy expuestos a la naturaleza. Además, es beneficiosa porque reduce los efectos dañinos asociados con la vida en la ciudad (contaminación, ruido, efecto de «isla de calor urbana»...).
—¿Cuánto tiempo deberíamos pasar en jardines? —No lo sabemos con seguridad, y es muy probable que esto varíe según la persona. Sin embargo, un estudio muy reciente en Gran Bretaña con cerca de 20.000 personas ha concluido que necesitamos al menos dos horas de exposición a la naturaleza por semana. No importa si esas dos horas se logran en una sola visita o en varias visitas más cortas.
—¿Cuál es el diseño ideal de un parque urbano para que produzca beneficios en la salud? —Además de ser seguros, deben tener instalaciones como bancos, papeleras, baños, sombra suficiente y áreas de juego que estimulen su uso. Además, las características estéticas, como diversidad de plantas, colores, sonidos agradables y belleza, hacen que las personas los utilicen y aprecien más y esto repercute en la salud. —¿Puede darnos algunos ejemplos concretos de soluciones innovadoras?
—La ciudad de Barcelona ofrece dos ejemplos interesantes. El primero es el proyecto «superilles» (supermanzanas). La idea es organizar la ciudad en nuevos bloques dentro de los cuales se restringe el tráfico y se añaden más elementos públicos verdes. El segundo proyecto, que apenas está comenzando, busca transformar los patios escolares en refugios contra el cambio climático. Los patios serán rediseñados en un proceso de colaboración entre las escuelas y los estudiantes, y se convertirán en espacios abiertos al público. La idea subyacente es aumentar las superficies de los espacios públicos y verdes en la ciudad, así como ofrecer entornos frescos donde las personas puedan pasar tiempo al aire libre y protegerse a sí mismas de las altas temperaturas.