Ejercicio CAMBIA EN POSITIVO TUS SENSACIONES
Busca pequeños intervalos de dos o tres minutos a lo largo del día para cerrar los ojos y centrar toda tu atención en captar tus sensaciones corporales. Tanto las sensaciones positivas y de bienestar como las sensaciones neutras y aquellas sensaciones corporales que se desprenden de zonas que permanecen en tensión. Cada vez que te sientas preocupado por algo, busca un lugar tranquilo a tu alrededor y cierra los ojos.
• Permanece atento durante unos tres minutos a todo lo que sucede en tu cuerpo. Durante ese tiempo, trata de delimitar todas aquellas zonas en las que sientes alguna tensión.
• Practica dos o tres respiraciones profundas, inspirando por la nariz y reteniendo unos pocos segundos el aire para soltarlo después por la boca muy lenta y suavemente.
• Deja que la respiración recupere su flujo normal y a continuación lleva de nuevo tu atención a las zonas en las que sientes la tensión. Percibe cómo envías a estas zonas los sentimientos de compasión, afecto y cariño. Si sientes la tensión en el estómago, por ejemplo, puedes colocar tus manos sobre él para conectar así mejor con la sensación que se manifiesta.
Es posible que no te guste sentir lo que estás sintiendo, pero la realidad es que estas sensaciones están ocupando distintas partes de tu cuerpo y pasarlas por alto o negarlas no te ayudará. Pero si a pesar de las señales de ansiedad que sientes, focalizas por ejemplo toda tu atención en observar el flujo de tu respiración, esta empezará a modificarse y, poco a poco, notarás cómo tu nivel de ansiedad irá disminuyendo.