«BAILAR CREA CONEXIONES CEREBRALES»
Le gusta bailar y como neurobióloga ha investigado los beneficios de esta práctica. Lucy Vincent nos anima a bailar para conservar la salud de nuestras neuronas.
LucyLucy Vincent vivió un momento muy estresante en su vida y el baile la ayudó a superarlo. Como científica neurobióloga, quiso saber qué había ocurrido en su cerebro mientras bailaba y se puso a investigar. Descubrió que el cuerpo es capaz de modelar el cerebro.
–¿Qué ha aportado el baile a suvida? ¿Qué siente al bailar?
–El baile ha cambiado mi vida de distintas maneras. Me encanta bailar porque me permite sentir más mi cuerpo y el cuerpo de mi compañero de baile. Bailando se generan sensaciones placenteras que mejoran el vínculo entre el cuerpo y el cerebro, lo que a su vez aumenta la autoestima y la conciencia de uno mismo. Me entristecería mucho si algún día no pudiera bailar. Aprendí cuando tenía 58 años, lo que demuestra que podemos empezar a cualquier edad. Tal es la felicidad que siento que lamento no haber bailado toda la vida.
–¿Y cómo beneficia bailar al cerebro? ¿Qué efectos produce?
–A través del aprendizaje de nuevas figuras y de la coordinación de movimientos complejos se facilita la creación de nuevas conexiones neuronales en el cerebelo que se encarga de coordinar los movimientos. Se desarrollan nuevas conexiones con las redes emocionales y cognitivas. Bailar produce más beneficios que el ejercicio, porque es el único deporte que ejercita el cuerpo buscando también la belleza y la seducción. Existen muchos estudios concluyentes sobre las mejoras que el baile produce sobre la memoria, la atención y el humor.
–Me llama la atención que mejore la memoria.
–Y aún estamos al principio de las investigaciones. Estoy convencida de que se descubrirán más beneficios sobre las habilidades intelectuales. Uno de los estudios sobre los efectos del baile sobre el cerebro que más me ha impresionado probó que las personas mayores de 65 años que bailaban todas las semanas presentaban mejoras en la memoria que no se produjeron en el grupo que hacía solo ejercicio.
–¿Entonces el baile debería estar en las escuelas?
–¡Por supuesto! El baile ayuda a fijar lo nuevo que se ha aprendido. Un estudio ha demostrado que los alumnos que habían interrumpido las clases para acudir a cursos regulares de baile obtenían mejores resultados en los exámenes.
«el baile mejora el vínculo entre cuerpo y cerebro. también aumenta la autoestima y la autoconciencia»
–¿Bailar ayuda con otras enfermedades neurológicas?
–Bailar hace que la progresión de las enfermedades neurodegenerativas sea más lenta porque estimula vías nerviosas que de otro modo no serían utilizadas. Ayuda a que los pacientes con Parkinson superen bloqueos motores y se ha demostrado, incluso, que los pacientes con Alzheimer pueden aprender nuevos pasos de baile.
–También es un buen método antiestrés para cualquier persona.
–Por supuesto, porque cuando bailamos se liberan endorfinas, oxitocina y dopamina, neurotransmisores que reducen la ansiedad y el estrés y nos hacen sentir bien. Bailar puede ayudarnos incluso cuando estamos sufriendo una depresión porque, además de tener un efecto sobre las hormonas del estrés, nos lleva a realizar movimientos sincronizándonos con otras personas y esto nos da un sentido de pertenencia a un grupo, un vínculo que tiene un poderoso efecto antidepresivo.
–Entonces, ¿cómo debo empezar a bailar?
–Puedes empezar a solas, si así lo prefieres, con vídeos que se encuentran en Youtube. Yo misma he creado un canal en el cual enseño pasos básicos (www.bit.ly/ BaileLV) y una web, clickanddance.com. Pero también se pueden tomar clases de baile de salón en cualquier lugar para empezar a bailar cuanto antes y en compañía. Los bailes que resultan más beneficiosos son aquellos que nos llevan a aprender constantemente nuevos pasos y figuras.