HÁBITOS
CÓMO AUMENTAR LA ENERGÍA
Cena carbohidratos. Elige alimentos saludables como el boniato, la patata o el arroz integral. Si los cocinas y los dejas en la nevera 24 horas, parte del almidón se hace resistente y adquiere las cualidades de la fibra que sirve de alimento a las bacterias. Estas producirán GABA, un neurotransmisor que invita a la relajación.
Ayuna unas horas. Puedes disponer las ingestas diarias de manera que permanezcas en ayuno un mínimo de 14 horas (por ejemplo, desde las 8 de la tarde a las 10 de la mañana). Este ayuno intermitente estimula los mecanismos de regeneración de tejidos y activa procesos protectores, como la autofagia, que favorecen el funcionamiento del sistema inmunitario y las mitocondrias, tus centrales celulares de energía.
Duerme lo necesario. La melatonina no solo es la hormona que induce el sueño, sino que también protege las mitocondrias frente al estrés oxidativo. Para producir melatonina es clave respetar las horas de sueño, no exponerse a luces brillantes por la tarde-noche y recibir la luz del sol por la mañana.
Practica ejercicio. Al generarse más mitocondrias tendrás más energía, prevendrás enfermedades y ralentizarás el envejecimiento. ¿Y qué debes hacer para que se multipliquen? Muy sencillo, solo tienes que hacer ejercicios de tonificación muscular y entrenamientos cortos, pero de alta intensidad.