Cuerpo Mente

EVITAR EL MAL ALIENTO POR LLEVAR LA MASCARILLA

Desde que llevamos mascarilla me noto mucho más el mal aliento. Me pregunto cómo evitarlo y también si puedo tener más problemas dentales por la mascarilla y cómo puedo prevenirlo­s. Sole G. (Barcelona)

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ElEl uso prolongado de la mascarilla no provoca en sí misma la halitosis o mal aliento, pero la puede favorecer y, sobre todo, poner en evidencia.

• El 80-85% de halitosis tienen su origen en la boca: por mala higiene dental y de la lengua, caries o prótesis mal adaptadas.

• Otras causas pueden ser sinusitis, amígdalas hipertrófi­cas, problemas de reflujo o mala digestión, y el consumo de ciertos alimentos como ajo, cebolla o un exceso de proteínas.

• El olor proviene de los cuerpos sulfurosos volátiles que se liberan al actuar las bacterias bucales sobre los restos de comida.

• Con la mascarilla el aire que se espira no se renueva y por eso se nota el mal aliento. Además se tiende a beber menos y respirar por la boca, lo que reduce la secreción salivar. Esto a su vez favorece las caries y problemas gingivales.

• Algunos consejos ayudan, como beber al menos 1,5 l de agua al día (puedes añadir unas gotas de limón y un poco de agua de mar), limitar el consumo de alimentos «problemáti­cos» y mejorar la higiene dental (con hilo de seda, cepillos interdenta­les y limpiadore­s de lengua).

• Pon aceite esencial de limón y de menta, 1 gota de cada, en 1 cucharadit­a de aceite de oliva y tómala antes de las comidas. O añade 1 gota de árbol de té en tu dentífrico y cepilla 3 veces al día al menos 2 minutos y medio.

• Hazte enjuagues con Tintura Madre de Caléndula y Equinácea, 10 gotas de cada, en medio vaso de agua, tras cepillarte.

• En homeopatía se indica Chelidoniu­m 5CH (en caso de mala digestión); Nux Vomica 5CH (si es peor por la mañana y después de comer); Pulsatilla 5CH (mal sabor de boca y ausencia de saliva) y Mercurius Solubilis 5CH (amígdalas hipertrófi­cas y encías inflamadas). La dosis es 3 gránulos 3 veces al día, fuera de las comidas.

• La respiració­n nasal es la mejor para la salud oral. Haz lavados nasales y ejercicios de respiració­n con la boca cerrada (inspira por un lado y espira por el otro, 10 veces de cada lado, por la mañana y por la noche). Esto dilata los conductos nasales y ayuda a respirar por la nariz.

• Las limpiezas de boca, hasta 2 al año, son básicas. ¡No te las saltes!

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MÉDICO
ANA DELGADO MÉDICO

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