Recetas para depurarse
Seguir una dieta depurativa durante varios días en la recta final del invierno permite estimular la limpieza y la regeneración del organismo. Te ayudará a conservar la salud y sentir ligereza.
Aunque el ayuno es sin duda una gran herramienta para ponernos en pausa y restablecer el equilibrio del cuerpo, lo cierto es que no siempre nos sentimos capaces de hacerlo o nuestro estado emocional, compromisos o ritmo de vida no nos lo permiten. En este caso, siempre podemos optar por algo más suave e igualmente excelente para dar un descanso a nuestro aparato digestivo: reducir la ingesta calórica y favorecer el detox. Es decir, seguir una dieta depurativa durante varios días, de tres hasta siete o incluso de veintiún días. En mi libro Nutrición natural (editorial Lunwerg) ofrezco consejos y recetas como las que te ofrezco en este artículo para que tu dieta sea más depurativa.
¿En qué consiste? Una dieta depurativa se basa en retirar todo lo que satura e intoxica los intestinos y órganos filtradores o eliminadores de toxinas, como el hígado, los riñones, la piel o los pulmones, a la vez que se añaden alimentos de digestión fácil que favorecen su limpieza y regeneración. Es de gran ayuda para descongestionar, reducir algunos kilos de peso corporal si sobran, contrarrestar procesos inflamatorios y recuperar el equilibrio ácido-base. Propuestas de dieta. Existen muchos tipos de dietas depurativas, como la tradicional de la medicina ayurveda, durante la cual solo se consume kitchari (judías mungo y arroz blanco con unas pocas verduras) o monodietas de algunos días con frutas, como manzana, piña o fresa. Otra opción es mantener una alimentación diaria ligera con gran aporte de líquido y una ingesta baja de hidratos de carbono, en combinación con ayuno nocturno.
Tomar durante tres días un caldo en comidas y cenas con alguna pequeña variación es una idea excelente. El desayuno puede ser pudin de chía, para limpiar los intestinos.