LA DIETA DE LA PIÑA
Con un irresistible punto entre dulce y ácido, la fruta tropical por excelencia viste postres perfectos y refrescantes para grandes ocasiones.
Tartas, brochetas, cócteles... La más tropical de las frutas endulzará las elaboraciones que te propongas.
TARTA DE JENGIBRE
Para 10 personas.
Dificultad: media.
Elaboración: 1 hora y 30 minutos (+ 3 horas en la nevera).
Ingredientes: 190 g de mantequilla, 275 g de azúcar, 3 huevos, 300 g de harina, 1 cucharada de jengibre molido, 1 y ½ cucharadita de levadura química, ½ cucharadita de bicarbonato, 60 g de almendras molidas, 250 ml de leche, el zumo de ½ limón.
Para el sirope: 450 g de piña sin el corazón y cortada en rodajas finas,
375 ml de agua, 20 g de jengibre pelado, 110 g de azúcar y cortado en rodajas.
Mezcla bien la leche y el zumo de limón y conserva el resultado en la nevera. Para hacer el sirope, calienta la piña, el azúcar, el agua y el jengibre en una cacerola a potencia media hasta que rompa a hervir. Cocina hasta que la piña esté tierna. Saca con cuidado las rodajas de fruta y deja que se enfríen un poco y mantén al fuego el cazo con el líquido 8 minutos. Retira el jengibre y reserva. Forra un molde redondo de metal y de 22 cm de diámetro con papel vegetal, coloca en él las rodajas de piña y riega con la mitad del sirope. Aparte, bate la mantequilla y el azúcar durante 10 minutos hasta obtener una textura amarillenta y cremosa y, sin dejar de remover, incorpora los huevos uno a uno, la harina, el jengibre molido, la levadura, el bicarbonato, la almendra y el mix de leche y limón. Vierte la mezcla en el molde sobre las rodajas de piña, cubre con papel de aluminio y hornea a 200 ºc durante una hora. Apaga el horno y deja reposar la tarta en su interior 20 minutos y 10 minutos más a la intemperie. Vuelca sobre un plato para desmoldar y pinta la superficie con sirope previamente calentado.