info salud. Aprende a respirar bien.
No se reduce a tomar aire y expulsarlo. Hacerlo correctamente requiere tiempo y atención, pero a cambio tiene la capacidad de regularizar cuerpo y mente.
La mayoría de las veces respiramos de un modo muy superficial, con rapidez, de forma poco profunda y entrecortada. Sentimos las respiraciones en la zona baja del abdomen o bien tan solo en la parte superior del pecho. “Esta forma limitada de respirar está causada en primer lugar por una mala postura que impide la expansión circunferencial de las costillas -apunta Zaira Leal, experta en yoga y profesora de la técnica Bowspring-. Respirar bien requiere su tiempo y mucha atención, mientras que la vida de la mayoría de las personas va a mucha velocidad y está dominada por el estrés o la ansiedad. En todo caso, son muy pocos quienes han tenido la oportunidad de aprender cómo respirar bien”.
con eL DiaFRagMa
Para corregir cómo respiras, empieza por tomar conciencia de dónde está el diafragma, “el músculo principal de la respiración, ubicado justo encima del estómago y por debajo de los pulmones”, detalla Beatriz Simón, responsable del área de respiración de la clínica de fisioterapia Rozalén. El ejercicio respiratorio por antonomasia es la respiración diafragmática. Nos ayuda a relajarnos, a desconectar, a mejorar nuestro patrón respiratorio de cara a hacer algún esfuerzo e incluso a recuperarnos de este.
RiTMo noRMaL
Ahora párate y observa cómo estás respirando. Ajusta tu postura. Para ello siente los pies en el suelo (puedes estar sentada), inspira y crece hacia arriba levantando tu caja torácica y alargando la barriga y la cintura. Si estás de pie y es posible, flexiona un poco las rodillas y lleva la pelvis hacia atrás, levanta la cabeza y afloja la tensión en los hombros y la mandíbula. Ahora inhala despacio, llenando la barriga y agrandando las costillas hacia los lados, hacia atrás y hacia delante, como si tuvieras un globo muy grande en tu interior. Exhala también despacio, dejando que el aire salga de forma lenta y continuada. Si quieres, puedes añadir una cuenta: inspira contando despacio hasta tres o cinco, y espira contando del mismo modo.
Una buena respiración debe ser ante todo nasal. La nariz es el filtro del aparato respiratorio que calienta y humidifica el aire antes de llegar al pulmón. La inspiración debe ser lenta y llevada a cabo por el diafragma. La espiración también debe ser nasal, pero durante el ejercicio físico puedes expulsar el aire soplando con los labios fruncidos.