ARMARIOS ÉTICOS
Son mujeres, exitosas y con estilo: las fotos y análisis de sus looks están asegurados. Así que ellas aprovechan el medio para mandar un mensaje.
Emma Watson ha elegido no limitarse a ser famosa, sino aprovechar para ser líder de opinión. Por ejemplo, colando en algo tan superficial como un photocall un mensaje ético (y político, y social), dando a conocer marcas sostenibles. Durante la promoción de La bella y la bestia hasta creó una cuenta de Instagram (@the_press_tour) para mencionar las marcas que vestía cada día y explicar su filosofía.
ALFOMBRA VERDE
Ella, como Keira Knightley, Gisele Bundchen o Cate Blanchett son algunas de las famosas que apuestan por las ‘Green Carpet’; es decir, que participan en retos o asociaciones que promueven llevar ropa fabricada de forma sostenible en la alfombra roja para hacerla más ‘verde’. Los pendientes que lució Blanchett en los Globos de Oro de 2014 provenían de uno de los proyectos de minería responsable en Bolivia y Colombia de Eco Age (una asociación creada por Livia Firth, la mujer de Colin Firth).
LA PRINCESA RESPONSABLE
Pero nada es comparable con el ‘efecto Megan Markle’, es decir, el impacto comercial que tiene cada prenda que utiliza, y que puede tener una buena utilidad social. Un ejemplo: el pantalón que lució en su visita a Oceanía, de la marca Outland Denim (que crea puestos de trabajo para camboyanas víctimas de la trata) se agotó en 48 horas, y el tráfico de la web de esa marca aumentó un 948 %. Lo mismo ocurrirá con la firma Reformation o con las zapatillas veganas de Veja. Como se pregunta algún medio británico -sin exagerar-, ¿salvará la duquesa de Sussex el mundo?
“Gracias al ‘efecto Megan Markle’ será posible emplear a 15 o 20 personas en Camboya”, anunció la marca Outland Denim.