MARÍA CASTRO
“Siempre que me enfrento a un reto digo: ‘¡Puedo!’”
¿QUIÉN ES?
Actriz, presentadora y bailarina (Vigo, 1981). Durante doce años practicó gimnasia rítmica, llegó a ser subcampeona de España en pelota. Trabajó en la televisión gallega hasta que la ficharon en la serie nacional SMS y posteriormente en Sin tetas no hay paraíso, ficción revelación de la temporada 2007-08, por la que ganó un Ondas. Ha tenido papeles protagonistas en Tierra de Lobos, Vive cantando, Seis hermanas y Ella es tu padre. Ha participado en más de diez cortos y largos.
POR QUÉ AHORA
La podemos ver cada sobremesa en Amar es para siempre (Antena 3). El próximo 4 de enero estrena la película Memorias de un hombre en pijama.
Mi hija Maia sabe que su mamá siempre está ahí, pero es bueno que vea que no abandono mi trabajo para cuidarla.
Forjada por la disciplina de un deporte tan duro como la gimnasia rítmica, la actriz María Castro está más que acostumbrada a dar dobles y triples saltos mortales, si por ello se entiende compatibilizar con la maternidad, el teatro, una serie diaria como Amar es para siempre y un programa como
Masterchef Celebrity. Si ella puede con todo, porque se trata de cumplir un sueño, ¿cómo no va a poder con dos mochilas al hombro y una enorme carpeta repleta de guiones con las que se mueve a todas partes?
¿Cómo es natalia, tu personaje en amar es para siempre?
Empieza siendo Ana pero se convierte en Natalia para averiguar el secreto que guarda la familia que ha destrozado su vida y la de su propia familia. Es una mujer herida que busca venganza. Trabajar en Amar es para siempre es un lujo, ya tenía ganas. Se podría decir que si no has pasado por Amar, no eres actor en España.
¿te ha Costado Construir un personaje tan herido?
Me costó un poco porque no soy una persona vengativa ni rencorosa. Busco en mí esas emociones, todos hemos sentido amor, desamor o ira. Están ahí, solo hay que llamar a la puerta, utilizarlas y volver a guardarlas.
llevas Contigo una enorme Carpeta Con los guiones que debes aprender Cada día. ¿Cuál es tu rutina?
Memorizar todo ese guion para muchos es un horror, para mí no tanto, enseguida cojo los textos. Lo que más me cuesta, como a muchas madres, es conciliar, que no lo hago solo por mi niña sino por mí misma porque no me quiero perder nada. Al final se puede gracias a los abuelos. Mi hija Maia sabe que su mamá siempre está ahí, pero creo que es bueno que vea que no abandono mi trabajo para cuidarla. Quiero que ella también luche por sus sueños y para eso tiene que ver mi ejemplo.
¿es neCesario inCulCárselo desde tan pequeñita?
Es que en casa siempre me han dado muchas alas. Mis padres confiaron mucho en mí aunque tuviesen sus miedos. Me decían que podía, tanto mientras fui gimnasta como cuando estaba estudiando o cuando decidí ser actriz.Tengo bastante autoestima porque ellos me la han dado, por eso quiero ofrecérsela también a mi hija.
diCes que ser gimnasta te ha forjado el CaráCter. ¿Cómo trasladas a tu trabajo Como aCtriz lo que aprendiste durante 12 años Como deportista profesional?
Soy como soy por la gimnasia rítmica. Estuve entrenando desde los 6 hasta los 18 años. He pasado más horas con mi entrenadora que con mi madre. He aprendido a ganar, perder, competir o ser buena compañera. Así que, en la vida, cada vez que me enfrento a un reto, vuelvo a salir al tapiz y siempre digo: ‘¡Puedo!’.
desde tu primer papel no has parado de trabajar. ¿es suerte o te lo has Currado?
Cuando me retiré de la gimnasia no había vivido nada, solo un pabellón y un tapiz. Le decía a mi madre: “¿Cómo se juega ahora a la vida? ¿Cómo se hace? ¿Se llama a las amigas? No sabía, era madura pero muy inocente para lo cotidiano. Entonces empecé a trabajar en una serie en Galicia. Tenía 19 años y estaba en segundo de INEF. No tenía ni idea, el primer día de rodaje hice una secuencia mirando a cámara como si fuera el telediario [risas]. Cuatro años después me fui a Madrid con trabajo y empecé a hacer castings, enseguida sonó la flauta y tuve suerte. Es estar en el momento adecuado porque te cogen por ser pelirroja o no te cogen porque lo eres. Tengo la impresión de que todo ha pasado muy rápido pero nunca he perdido la ilusión.
tu presenCia en el último masterChef Celebrity no ha pasado desaperCibida. has sido la sonrisa del programa.
Siempre he sido una persona muy alegre. Me decían que era el cascabel de la casa y cuando te cuelgan ese
sambenito hay que mantenerlo. Tengo mis momentos pero son pocos. Si algo me pasa, procuro reponerme rápidamente y seguir adelante. Si tú le das a las vida una sonrisa, casi seguro te la devuelve. Es un trabajo de dentro hacia afuera y de afuera hacia adentro, si sonrío se contagia mi alma.
Se te veía con muy buena mano en la cocina y te poStulaban para ganar. ¿te dio pena irte?
Me dio mucha alegría ver la reacción de la gente cuando me fui, recibí mucho cariño. Al día siguiente tenía el buzón de Instagram lleno de mensajes, lo borraba y se volvía a llenar. Se agradece que a la gente le guste tu forma de pensar, de ponerse frente a la cocina porque eso traspasa la pantalla. Me marché a casa tranquila porque de esta forma tuve tres semanas para preparar mi boda, si no iba a casarme casi sin traje. Me fui emocionada porque fueron unas semanas intensas pensando solo en cocina y con muy buena relación con mis compañeros. Ahora, sé que volver a cruzarme con ellos va a ser casi imposible.
¿cómo te preparaSte?
Me gusta cocinar y he aprendido mucho de mi madre, que como buena gallega cocina muy bien, pero también estuve un mes con María Muñiz, una cocinera que se formó con el chef Mario Sandoval. Cada día llevaba a Maia a la escuela infantil y luego cocinaba con María toda la mañana. En casa estaban encantados porque tenían tres o cuatro platos para probar con postres y todo. Aprendí todas las nociones básicas de la cocina, a hacer un arroz, un sofrito, todo lo que me podía ayudar para preparar un plato. Luego, en el concurso te dan algunas masterclass dos veces a la semana durante 40 minutos, te enseñan algunas técnicas y estrategias, que a veces tienes que utilizar en el programa o no.
Supongo que deSpuéS de enfrentarte a jueceS muy duroS en tu etapa de gimnaSta profeSional, laS apreciacioneS de Samantha, jordi y pepe no te afectan tanto.
Soy muy perfeccionista. Anoto todo lo que está en mi mano y puedo mejorar. De hecho, cuando era niña me fastidiaba que no me corrigieran. Pero tengo claro que Masterchef me ha servido para asumir los errores y recordar que no todo ocurre siempre tal y como planeamos. Lo sé porque vengo de un deporte muy injusto y subjetivo.
también un emplatado eS algo muy Subjetivo, ¿no?
Y un sabor también. Pero son las reglas del juego. Por eso cuando la gente me dice: “No te disgustes, sigue adelante”, les digo: “Pero cómo me voy a disgustar, si es un concurso”. Por mi parte voy a seguir cocinando y haciendo tartas para mis amigos. Ha sido una experiencia muy divertida y agotadora.
como perSonaje mediático que ereS, hemoS Sido eSpectadoreS de tu vida: tu embarazo, el nacimiento de tu hija, tu pedida de mano en directo en el hormiguero. ¿cuál eS el límite?
Hay uno clarísimo, la cara de la niña nunca la he sacado en las redes sociales. Mostrar tu cotidianidad te humaniza y te hace ver que todos somos iguales, que tengo los mismos miedos y preocupaciones, y estoy igual de cansada cuando vuelvo de trabajar que el resto. La gente lo agradece y empatiza contigo. En cuanto a la pedida de mano, la sentí igual de privada que la de cualquiera porque cuando José Manuel empezó a hablar, para mí desaparecieron Pablo y el público. No me podía creer lo que me estaba pasando. La gente lo recibió con mucho cariño, como un gesto muy verdadero. Al día siguiente sabía por la calle quién había visto El homiguero y quién no.