LA BARBACOA
Un clásico del verano –tanto que hasta tiene una canción– que puede ser una auténtica prueba de fuego para aquellos que no quieran engordar.
Si no quieres perderte la fiesta, opta por las verduras a la parrilla (el verano es la época del calabacín y los pimientos) o por el pescado azul. Las sardinas y el bonito aparecen en las pescaderías al final de la primavera y son una excelente fuente de nutrientes, además de ricas en ácidos grasos omega 3.
Asimismo, el marisco también puede disfrutarse a la parrilla y es una buena alternativa a los chorizos criollos o las costillas. Tienen pocas calorías, un nivel bajo de carbohidratos y aportan proteínas.