Club de Lectura, con Paloma Sánchez-Garnica.
El 19 de junio tuvo lugar el IV Club de Lectura Mía. La invitada fue la escritora Paloma Sánchez-Garnica, quien nos habló de su última y exitosa novela, ‘La sospecha de Sofía’.
En febrero de este año vio la luz la séptima novela de Paloma Sánchez-Garnica, La Sospecha de Sofía (Planeta). Ambientada en mayo de 1968, entre Madrid, París y Berlín, nos cuenta la historia de tres personajes en busca de su identidad en medio de una sucesión de terribles acontecimientos y encuentros inesperados que trastocarán para siempre la vida de Sofía y su marido Daniel. Intrigante y trepidante, esta fantástica novela está siendo todo un éxito que ya va por la cuarta edición. Un
éxito que Paloma celebra, sobre todo, porque la historia se le resistió en un principio: “Tardó en salir, pero yo creo que las historias me eligen, no las elijo. Estuve un año y medio buscando distintas historias hasta que, por una buena lectura, me surgió la primera chispa, empecé a escribirla y fue entrega absoluta a los personajes, a sus historias…”, nos contó.
SU NOVELA MÁS ESPECIAL
Según nos dijo Paloma, la última novela que escribe es siempre la más especial para ella, por su afán de mejorar en cada obra. Pero La sospecha de Sofía lo es, por muchos otros motivos: “Tardó mucho en llegar a mí, y eso me provocó sensaciones de fracaso y frustración, e incluso de querer tirar la toalla. Hasta llegué a repetirme una frase todos los días antes de ponerme a escribir: ‘No me
La historia de ‘La sospecha de Sofía’ tardó en llegar a mí. Un día surgió la primera chispa y me entregué por completo a ella.
voy a rendir’”, nos confesó. Además, mientras la escribía, tuvo que enfrentarse a una serie de acontecimientos que la han marcado en el plano personal: “A los 20 días de empezar a escribir, cuando llevaba 63 páginas, me dieron una mala noticia que tuve que asimilar. Fueron los personajes los que me salvaron, me ayudaron, me dieron un chute de optimismo”, nos contó. Por si esto fuera poco, su hijo, gran aficionado a la música, “compuso y me regaló una banda sonora para la novela, ¡que es preciosa!”, nos dijo emocionada.
LA HISTORIA COMO IDENTIDAD
Licenciada en Derecho y Geografía e Historia, Paloma Sánchez-Garnica tiene un sello de identidad que está presente en toda su obra. No se trata de novelas históricas, pero sí de historias que se desarrollan en momentos destacados: “Hablo de personajes como nosotros, con sus historias, y las enmarco en un determinado momento. La forma en la que gestionan sus conflictos, sus inseguridades, sus amores, sus emociones… se ven influidos por el momento en que viven, por las leyes, costumbres, prejuicios o las distintas formas de ver la vida de cada época, ya sea en la Guerra Civil, el siglo XXII o en mayo del 68, como es este caso. Creo que ese es mi sello personal”, asegura la autora.
EN PROCESO DE EBULLICIÓN
Según nos adelantó la escritora, ya está trabajando en su próxima obra, aunque no se aventura a dar una fecha: “No puedo adelantar nada, porque estoy en pleno proceso de ebullición, pero ya tengo en mente mi próxima historia. Ya he escrito algo, pero necesito desconectar de Sofía y sus sospechas para poder centrarme en los nuevos personajes”. Una vez desconecte y se siente a escribir, se dejará llevar por los personajes, como hace siempre: “Escribo de forma espontánea, cuando me siento, no tengo un esquema”, nos confesó. Una fórmula que, sin duda, le funciona a las mil maravillas.