¿Tus genes desayunan?
Hay personas que devorarían nada más despertarse y otras, en cambio, que aguantan con un café hasta mediodía. La causa parece estar en los genes. Según un estudio llevado a cabo por las universidades de Harvard y Murcia, levantarse con o sin hambre está relacionado con seis variantes en los genes. Este estudio también ha determinado que saltarse el desayuno no es saludable, pues las personas con genes que les empujan a saltarse el desayuno son más propensas a coger peso, además de a fumar.