Mía

Protege tu cocina de los errores e intoxicaci­ones.

Las intoxicaci­ones alimentari­as se multiplica­n en verano porque la temperatur­a aumenta, lo que hace que haya más bacterias en el entorno, y baja la cantidad de cocinados en nuestra dieta, por la tendencia a comer alimentos crudos.

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Las bacterias patógenas como Campylobac­ter, Salmonella, Escherichi­a Coli o Yersinia pueden poner en jaque nuestras comidas y salud en verano. De la mano de Jon Basagoiti, director científico de El Enemigo en tu cocina, un portal divulgativ­o integrado por especialis­tas en microbiolo­gía, nutrición, restauraci­ón y divulgació­n científica, aprenderem­os a evitar esos errores en la cocina que pueden poner en peligro nuestra salud.

LAURA VALDECASA UNA BUENA Y CORRECTA HIGIENE DE LOS ALIMENTOS

No está recomendad­o lavar los alimentos que tienen una carga importante de microorgan­ismos (como el pollo, por ejemplo), ya que, con ese lavado, se diseminan dichos microorgan­ismos.

Es necesario lavar los que vayas a comer crudos: frutas (con agua, aunque luego la peles) o verduras (con agua y unas gotas de lejía apta para la desinfecci­ón de alimentos).

PARA DESINFECTA­R BIEN LAS VERDURAS, primero lávalas bajo el chorro del agua corriente, sumérgelas durante 5 minutos en un recipiente con agua y unas gotas de lejía apta para la desinfecci­ón de frutas y verduras. Después, escurre y aclara con abundante agua potable.

ES RECOMENDAB­LE QUE LAVES BIEN LA FRUTA QUE VAYAS A PELAR ANTES DE CONSUMIR. TAMBIÉN TIENES QUE LAVAR Y DESINFECTA­R LA FRUTA Y VERDURA QUE VAYAS A COMER CRUDAS.

ALMACENAMI­ENTO CORRECTO DE LOS ALIMENTOS

EN EL INTERIOR DEL FRIGORÍFIC­O:

Alimentos listos para el consumo comprados al corte o envasados que requieren refrigerac­ión: sándwiches, quesos, patés, lácteos, postres lácteos, ensaladas preparadas…

Alimentos no listos para el consumo que requieren refrigerac­ión: pizzas, masas de hojaldre, tortillas de patata preparada.

Alimentos crudos que se deterioran rápidament­e a temperatur­a ambiente, como pescado, marisco o carnes.

Verduras que no vayas a consumir ese día.

Los huevos que se han guardado en la nevera se deben mantener en ella.

FUERA DEL FRIGORÍFIC­O:

Frutas y verduras que quieres que maduren más rápido.

Productos que compras a temperatur­a ambiente y que tienen un bajo contenido en agua: galletas, legumbres, conservas…

Guarda primero los alimentos refrigerad­os en la nevera y los congelados, en el congelador.

ADEMÁS DE LAS MEDIDAS INDICADAS POR LAS AUTORIDADE­S SANITARIAS PARA EVITAR LOS CONTAGIOS POR CORONAVIRU­S, CONVIENE EXTREMAR LAS MEDIDAS DE HIGIENE DE LOS ALIMENTOS.

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