¿QUÉ ES LA ENFERMEDAD INFLAMATORIA INTESTINAL?
RESPUESTA: El concepto de enfermedad inflamatoria intestinal se refiere básicamente a dos enfermedades parecidas, pero con algunas diferencias: son la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa. Ambas producen inflamación de una parte del intestino, de distinta intensidad. La colitis ulcerosa suele afectar más al recto, mientras que la enfermedad de Crohn puede afectar a cualquier parte del intestino, aunque, con más frecuencia, al intestino grueso del lado derecho. La enfermedad inflamatoria intestinal no es hereditaria, pero tiene algunos factores que hacen más probable contraerla: generalmente, se da antes de los 30 años, en personas blancas de países desarrollados con padres o hermanos que también la padezcan. El tabaquismo también aumenta el riesgo de padecerla, en especial, la enfermedad de Crohn, así como el uso de antiinflamatorios no esteroideos (ibuprofeno y naproxeno).
Las características de la enfermedad más destacables son:
Altera las funciones de absorción de alimentos y produce desnutrición.
Tiene períodos de brotes con muchos síntomas y de remisión con pocos síntomas.
Produce diarrea, sangrado en heces, fiebre, cansancio y pérdida de peso.
La colitis ulcerosa afecta solo al colon y, con frecuencia, al recto.
La enfermedad de Crohn puede afectar a todo el intestino y, con frecuencia, a la zona en que se une el intestino delgado y el grueso, que se llama afectación ileocecal.
En cuanto a su tratamiento, existen diversas opciones para ambos cuadros, pero la idea básica es administrar medicación antiinflamatoria de distinta potencia. Como existe gran cantidad de fármacos con interacciones, beneficios y riesgos, generalmente son pautados por un médico especialista en enfermedad inflamatoria.
Algunas veces es necesaria la cirugía, esto ocurre cuando el tratamiento no ha logrado mejorar la inflamación y el paciente tiene muchos síntomas. En otras ocasiones, la inflamación es tan intensa que hay que extirpar el segmento de intestino inflamado. Es importante mencionar que la enfermedad inflamatoria intestinal no tiene cura, pero con los tratamientos actuales es controlable en la gran mayoría de los casos. Los pacientes con esta enfermedad tienen la misma esperanza de vida que alguien que no la padezca.